Las autoridades rusas han liberado a 49 prisioneros ucranianos, entre ellos efectivos que participaron en la defensa de Azovstal (Mariúpol) en los primeros compases de la invasión rusa, según el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, que espera «traer a casa» a todas las personas que siguen en poder de Rusia, «tanto militares como civiles».
Zelenski ha subrayado en redes sociales que Kiev trabaja «incansablemente» para «lograr la liberación de prisioneros y rehenes». La lista de este viernes incluye civiles y miembros de las Fuerzas Armadas, la Guardia Nacional, la Policía Nacional y la Guardia Fronteriza. El mandatario ucraniano ha expresado un especial reconocimiento a las tropas que siguen «llenando el 'fondo de intercambio'», un eufemismo con el que se refiere a las capturas de militares rusos potenciales de ser en el futuro moneda de cambio.
Sólo en la incursión de Kursk, las autoridades de Ucrania habrían detenido a cientos de personas. «Todos los guerreros que capturan a los ocupantes rusos y todos los servicios que neutralizan a los saboteadores y colaboradores hacen que la liberación de nuestra gente esté más cerca», ha enfatizado Zelenski.
Además, el presidente ucraniano volvió a insistir este viernes en que Ucrania necesita poder atacar objetivos militares situados dentro de la Federación Rusa para poder cambiar el curso de la guerra a su favor, horas antes de que el presidente de EEUU, Joe Biden, se reúna en Washington con el primer ministro británico, Keir Starmer, para abordar la cuestión. «Cualquiera que vea en el mapa desde dónde lanza Rusia sus ataques, dónde entrena a sus tropas, mantiene a sus reservas y sitúa sus infraestructuras militares entiende claramente por qué Ucrania necesita capacidades de larga distancia», dijo Zelenski durante el encuentro en la capital ucraniana.
El jefe del Estado recordó que transmitió con detalle este argumento al secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, y al ministro de Exteriores británico, David Lammy, durante su visita a Kiev de este miércoles. «Después de nuestra conversación, pienso que no quedan preguntas sin responder sobre por qué Ucrania necesita suficientes capacidades de largo alcance», agregó Zelenski. El mandatario subrayó la importancia de que, además de obtener permiso para golpear con ellos dentro de Rusia, debe recibir suficiente armamento de esas características «para cambiar de verdad el curso de la guerra y obligar a Rusia a buscar la paz».
Tras reunirse con Zelenski este miércoles, Blinken y Lammy dijeron que transmitirían la información recibida a Biden y Starmer, quienes deben hablar este viernes en Washington del asunto y tomar una decisión. «Cuando pedimos estos sistemas oímos repetidamente 'estamos trabajando en ello'», afirmó Zelenski en el foro.
«El tiempo pasa, pero los misiles rusos y los drones iraníes continúan sembrando el terror en nuestros cielos y entre nuestra gente», remachó. El jefe del Estado ucraniano también pidió que se envíe con celeridad el armamento ya prometido para equipar con garantías a las tropas ucranianas que combaten en el frente, e insistió en que los países de la OTAN deben ayudar a Ucrania a proteger su territorio de los ataques aéreos rusos derribando los misiles y los drones que se acercan a la frontera de los países de la Alianza limítrofes con Ucrania.