El valor del oro continúa su ascenso imparable en los mercados internacionales al filo del cierre del presente mes de agosto de 2025, impulsado principalmente por una demanda física sin precedentes en Asia y la creciente inestabilidad política que recorre Europa y Estados Unidos. El metal precioso confirma una vez más su condición de activo refugio preferido por inversores de todo el mundo cuando las aguas financieras y geopolíticas se agitan.
Los datos procedentes de Hong Kong revelaron que las importaciones netas de oro hacia China se duplicaron con creces durante julio de 2025, alcanzando cifras que no se veían desde hace varios años. Paralelamente, el Banco Popular de China ha continuado incrementando sus reservas auríferas por noveno mes consecutivo, en lo que los analistas interpretan como una estrategia a largo plazo para diversificar sus activos frente a posibles turbulencias en el sistema monetario internacional.
En España, los inversores también han mostrado un renovado interés por este metal precioso, con un incremento del 18 % en la demanda durante el segundo trimestre de 2025 según datos del Consejo Mundial del Oro. Los expertos financieros españoles recomiendan cautela pero atención a las oportunidades que pueden surgir en un contexto de alta volatilidad como el actual.
La tormenta política que azota Francia está teniendo repercusiones significativas en todo el panorama financiero europeo. Las acciones y bonos franceses han experimentado una dramática caída tras el anuncio de recortes presupuestarios por parte del gobierno minoritario del primer ministro François Bayrou. La situación se ha agravado después de que los principales partidos de la oposición declararan que no respaldarán la moción de confianza programada para el 8 de septiembre de 2025.
Esta incertidumbre política en la segunda economía más grande de la eurozona ha encendido las alarmas entre los inversores, que temen nuevas tensiones fiscales con potencial para desestabilizar los mercados regionales. Los analistas prevén que esta situación continuará impulsando la compra de activos considerados seguros, como el oro, mientras persista la inestabilidad.
Las implicaciones para España no son menores, ya que cualquier crisis fiscal o política en Francia suele tener un efecto dominó en las economías vecinas. El diferencial entre los bonos españoles y alemanes ha aumentado 15 puntos básicos desde que comenzó esta crisis, un indicador de la creciente preocupación en los mercados.
Reserva Federal en el punto de mira
Al otro lado del Atlántico, en Estados Unidos, la atención de los mercados se mantiene fija en la Reserva Federal tras la controvertida decisión del presidente Donald Trump de destituir a la gobernadora Lisa Cook, generando un intenso debate sobre la independencia de la institución monetaria más importante del mundo. Este movimiento sin precedentes ha aumentado la volatilidad en los mercados internacionales y ha añadido un factor adicional de incertidumbre.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, recientemente señaló el incremento de los riesgos para el mercado laboral estadounidense, dejando entrever la posibilidad de una reducción de tipos de interés para septiembre de 2025. Los mercados de futuros actualmente asignan una probabilidad del 78 % a esta flexibilización monetaria, aunque los datos de inflación del PCE que se publicarán este viernes podrían resultar determinantes para la decisión final.
La política monetaria estadounidense tiene un impacto directo en los mercados globales, incluido el del oro. Históricamente, las bajadas de tipos suelen favorecer a los activos no productivos como los metales preciosos, ya que reducen el coste de oportunidad de mantenerlos en cartera frente a inversiones que generan intereses.
Conflictos que mantienen la tensión global
De todas formas los riesgos geopolíticos siguen siendo un factor determinante en el atractivo del oro como valor refugio. Ucrania continúa reportando la interceptación diaria de decenas de drones rusos, evidenciando que el conflicto iniciado en 2022 está lejos de resolverse, pese a la reiterada gesticulación de Trump. La guerra ha entrado en una fase de desgaste donde ambas partes mantienen posiciones defensivas pero con constantes ataques aéreos que minan las infraestructuras y a la propia población civil.
Simultáneamente, la situación en Gaza se ha intensificado con las intenciones del gobierno israelí de tomar por tierra Ciudad de Gaza, en medio de un creciente movimiento antibélico dentro del propio estado hebreo. Las manifestaciones en Tel Aviv han reunido a más de 150.000 personas durante las últimas semanas, exigiendo un alto el fuego y la liberación de los rehenes que aún permanecen cautivos en manos de Hamás.
Estos focos de tensión internacional, sumados a las presiones políticas internas y transfronterizas en distintas regiones, continúan respaldando el atractivo del oro como activo seguro en tiempos turbulentos. Los analistas de mercados prevén que esta tendencia podría mantenerse durante los próximos meses, especialmente si se materializan algunos de los riesgos políticos actualmente en el horizonte.
En particular las proyecciones para el precio del oro en lo que resta de 2025 son mayoritariamente alcistas. Los expertos de JPMorgan han elevado su previsión de precio medio para el año hasta los 2.450 dólares la onza, un incremento del 12 % respecto a sus estimaciones de principios de año. Este optimismo se fundamenta tanto en la demanda física sostenida como en los factores macroeconómicos y geopolíticos. En el Viejo Continente los inversores están prestando especial atención a las elecciones que se celebrarán en varios estados durante los próximos meses, así como a la evolución de la crisis política francesa. Cualquier giro hacia posiciones más extremas o euroescépticas podría desencadenar nuevas oleadas de compras de activos refugio, beneficiando directamente al oro.
El oro tiene algunos problemas como inversión. No me fio del "oro-papel" porque se dice que hay mucho más oro en papel que el oro físico que respalda dicho papel. Tampoco me ofrece confianza el guardar el oro en casa por si te lo roban. Puedes alquilar algún sistema de custodia pero eso supone un gasto. Luego está el riesgo de que te engañe un vendedor que te de un lingote falso, cubierto de oro pero relleno de otro metal, aunque supongo que ahí puede entrar alguna empresa certificadora de los lingotes que te vendan. Además, imagino que hacienda tendrá que pedir su parte (como en todo). La seguridad es relativa. Si vienen mal dadas podría repetirse lo que sucedió en USA en 1033 cuando el presidente Roosvelt prohibió la acumulación de oro por parte de los ciudadanos en la Orden Ejecutiva 6102. Aun así, lo peor para conservar el poder adquisitivo es mantener el dinero quieto en el banco. Así que, de perdidos al río. Oro o Bitcoin, que se ha dado en llamar "oro digital".