El huracán 'Melissa' ha golpeado Jamaica durante la noche de este martes con fuerzas de categoría 5, la máxima posible, provocando la destrucción de viviendas e infraestructura antes de dejar el país y dirigirse a Cuba ya con categoría 4 pero amenazando igualmente a múltiples provincias ante su entrada, que ha llevado a la evacuación de más de 735.000 personas.
Con vientos que han llegado a superar los 240 kilómetros por hora, 'Melissa' ha destrozado casas, arrancado árboles y dejado sin electricidad a buena parte de la costa sudoeste de Jamaica a su paso por el país, donde ha provocado repentinas inundaciones y deslizamientos de tierra, según ha recogido el diario 'Jamaica Observer'. El propio primer ministro del país, Andrew Holness, ha lamentado en su cuenta de Facebook que la isla «ha sido devastada por el huracán 'Melissa'», aunque ha mostrado su esperanza de «reconstruir y hacerlo aún mejor que antes».
«Esta noche animo a los jamaicanos a tener esperanza», ha afirmado en un mensaje en el que ha admitido que muchos de sus ciudadanos «se sienten desanimados» y «es posible que sus hogares hayan sufrido daños o hayan quedado destruidos y que sus comunidades y pueblos ya no sean los mismos». «Nos estamos movilizando rápidamente para iniciar las labores de socorro y recuperación, y estaremos con ustedes en cada paso del camino», les ha prometido. Horas antes, ha declarado el país entero como «zona catastrófica» por el paso del huracán 'Melissa', después de que se hayan dado a conocer los primeros daños por el paso del ciclón, que ha afectado a al menos cuatro importantes hospitales.
Mientras tanto, Cuba ha empezado a registrar los primeros daños provocados por la llegada de 'Melissa' al suroeste de la isla, mientras que «más de 735.000» personas han sido evacuadas en el país de manera preventiva, según ha afirmado el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, en la red social X. El Instituto Meteorológico (Insmet) ha previsto que el huracán, que se ha aproximado al país con categoría 4 y vientos de hasta 215 kilómetros por hora, penetre en la provincia de Santiago de Cuba y se aproxime también a la de Granma, con mareas que afectarán a ambas y también a Guantánamo, según las informaciones que ha recogido el portal de noticias Cubadebate.
Este miércoles el huracán Melissa ha azotado la costa meridional del este de Cuba, horas después de causar estragos en la vecina Jamaica, siendo el ciclón más potente jamás registrado en el país caribeño. Melissa se encontraba a unos 95 kilómetros al oeste-suroeste de Guantánamo, Cuba, con vientos máximos sostenidos de 195 kilómetros por hora, según informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de EEUU en su última actualización. El huracán había descendido a categoría 3 desde su llegada a la costa, cerca de la ciudad de New Hope, en el suroeste de Jamaica, con vientos sostenidos de hasta 295 kilómetros por hora, según el pronosticador con sede en Miami. Esta velocidad es muy superior a la mínima de vientos de categoría 5, de kilómetros por hora, el nivel más alto en la escala de vientos Saffir-Simpson.
En el suroeste de Jamaica, la parroquia de Saint Elizabeth quedó «sumergida», dijo un alto cargo y más de 500.000 residentes estaban sin electricidad. «Las informaciones que hemos tenido hasta ahora incluirían daños en hospitales, daños significativos en propiedades residenciales, viviendas y propiedades comerciales también, y daños en nuestra infraestructura vial», dijo el primer ministro de Jamaica a CNN tras el paso de la tormenta. Holness dijo que el Gobierno no había recibido ninguna confirmación de víctimas mortales relacionadas con la tormenta, pero dada la fuerza del huracán y la magnitud de los daños, «prevemos que habrá alguna víctima mortal». Los vientos de Melissa disminuyeron a 233 kilómetros por hora, dijo el CNH, mientras la tormenta pasaba por la isla montañosa, azotando comunidades de las tierras altas vulnerables a deslizamientos de tierra e inundaciones.