Con el Audi R8 e-tron, la firma de los cuatro aros muestra lo deportiva y dinámica que puede ser la movilidad eléctrica. Y aunque en esta ocasión esta variante no se vaya a producir en serie, le ha aportado a la marca un extenso know how para el desarrollo de sus futuros modelos con esta tecnología de propulsión.
En esta versión eléctrica, Audi da un nuevo paso evolutivo de su tecnología de construcción ligera gracias a una configuración Multimaterial Space Frame en el que grandes piezas de material plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP) complementan a la estructura de aluminio. La batería de iones de litio también es una muestra de la capacidad de desarrollo de Audi, ya que ha sido concebida y fabricada en la propia empresa.
A simple vista, el Audi R8 e-tron se parece al Audi R8 con motor de gasolina, pero la carrocería no tiene más de nueve piezas iguales. El coeficiente de resistencia aerodinámica del deportivo de altas prestaciones con sistema de propulsión eléctrico es de 0,27. La supresión del motor de combustión, de la caja de cambios y del sistema de escape ha permitido diseñar unos bajos del vehículo planos. En su parte trasera, un difusor largo y en posición relativamente inclinada canaliza el aire de tal manera que armoniza con el flujo de aire en la zaga. El habitáculo está caracterizado por delicadas superficies de CFRP, suave cuero y Alcantara. En el cuadro de instrumentos, las bandas LED proporcionan información sobre la temperatura del líquido refrigerante y el estado de carga de la batería. El gran powermeter indica la potencia y la recuperación de energía en una escala del 0 al 100%. La pantalla en color de siete pulgadas sirve como sistema de información al conductor; junto con el monitor MMI muestra todos los datos importantes sobre la conducción eléctrica.
Otra innovación en el Audi R8 e-tron es el retrovisor interior digital. Un display de alta resolución con una diagonal de 6,8 pulgadas y construido en tecnología AMOLED (Active Matrix Organic Light Emitting Diode) sustituye al retrovisor interior. Una cámara pequeña y muy eficaz registra la imagen en un amplio campo visual y con una elevada sensibilidad.
Este nuevo R8 e-tron monta en el eje trasero dos motores eléctricos alimentados por una batería que ofrece hasta 215 kilómetros de autonomía y que se puede recargar desde una red de corriente alterna en un tiempo de hasta una hora, en función de la potencia. Los 380 CV erogados le permiten llegar de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos.
Audi equipa al R8 e-tron con un sistema denominado e-Sound que emite un sonido creado por sintetizador, y que se puede escuchar hasta los 60 km/h de velocidad. Un pequeño ordenador genera las frecuencias basándose en los datos que obtiene de la unidad de mando del sistema de propulsión, mientras que un robusto sistema de altavoces situado en los bajos del vehículo las irradia a la carretera.