El uso del aire acondicionado del coche puede incrementar, y bastante, el gasto de combustible de un coche. Aunque cada vez se fabriquen modelos más eficientes en cuando a consumo, un porcentaje de entre el 5 y el 20% puede esfumarse al encender el climatizador. Ahora que ya parece que se acerca el calor, igual te conviene aprenderte estos trucos para que tu presupuesto en gasolina no salga, literalmente, volando de tu bolsillo.
Puede parecer que la única función que desempeña el sistema de climatización de un coche es hacer el viaje más cómodo para los pasajeros y el conductor. Pero también ayuda, por otro lado, a eliminar la humedad del habitáculo y a condensarla, mejorando la visibilidad en caso de que se empañen los cristales. Así mismo, limpia y purifica el aire de impurezas e incluso partículas como polen para mejorar la calidad del mismo dentro del coche.
Así que la próxima vez que, ahora que van a subir las temperaturas, te plantees desconectar el aire acondicionado para ahorrar parte del tanque de combustible, será mejor que recuerdes estos trucos para que reducir el impacto en el consumo y que disfrutes del sistema de climatización de tu coche:
• Una revisión a tiempo. Si el sistema de climatización funciona correctamente, no disparará el gasto.
• Bajar la temperatura antes de arrancar. Esto evitará un gasto extra. El truco de bajar una ventanilla y abrir y cerrar la puerta del lado contrario varias veces funciona.
• Aire acondicionado y ventanillas bajadas al arrancar. Cuando inicies la marcha, enciende el aire y abre unos centímetros las ventanillas para facilitar que salga el aire caliente del coche y así ayudar al sistema.
• Aprender a usar (bien) el climatizador. Entre otras cosas, alternar el aire del exterior con el del interior puede ayudar a que el consumo se reduzca.
• La temperatura adecuada: entre 21 y 23 grados. Fijar los grados por debajo de este límite generará un gasto excesivo e innecesario.
• Durante el viaje ¿ventanillas abiertas o cerradas? Pues depende. Si el trayecto es urbano y no se sobrepasa la velocidad de 80 km/h, el aire que entre del exterior no afectará a la dinámica del coche así que se podría ahorrar apagando el aire acondicionado. Si se superan los 110 km/h, es mejor cerrar y enchufarlo ya que circular con las ventanillas abiertas en este caso podría incrementar aún más el gasto de combustible.