Al menos 70 personas han muerto en dos ataques perpetrados ayer contra dos mezquitas de la secta minoritaria Ahmadi en la ciudad de Lahore, en el este de Pakistán, por un grupo de hombres armados que tomaron varios rehenes. El grupo Tehrik-e-Taliban Pakistán (TTP) ha reivindicado la autoría de los ataques, los más graves registrados en el país desde el pasado 31 de diciembre.
Los hechos sucedieron a primeras horas de la tarde cuando un grupo armado comenzó a disparar poco después de que concluyesen las oraciones y lanzó varias granadas contra las dos mezquitas.
Sajjad Bhutta, subcomisario de Lahore, cifró el número de víctimas mortales en al menos 70, y el de heridos en 78. Bhutta precisó que en la mezquita del barrio Garhi Shahu han muerto más personas que en la situada en la zona de Model Town porque en la primera tres de los milicianos detonaron los cinturones de explosivos que llevaban cuando la Policía intentó entrar en el edificio. La Policía no habí encontrado a dos de los atacantes. Según la cadena de televisión local GEO, el atentado ha sido reivindicado por los talibán paquistaníes.
El ministro principal de Punjab dijo que estos incidentes generarán una mayor decisión para combatir el extremismo.