El Gobierno promoverá la dación en pago -entrega de la vivienda para saldar la hipoteca contraída con el banco- para familias con todos sus miembros en paro y con primeras viviendas de menos de 200.000 euros. Así lo anunció la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en rueda de prensa, tras el Consejo de Ministros. "Estas medidas buscan paliar la situación dramática de muchos españoles que lo han perdido todo", sentenció, para después recordar que 1,5 millones de familias tienen todos sus miembros en desempleo.
En concreto, la dación en pago se permitirá, si los bancos que concedieron la hipoteca lo aceptan, a las familias en paro con viviendas por valor de hasta 200.000 euros en ciudades de más de un millón de habitantes, y de hasta 180.000 euros en núcleos de población de más de medio millón de habitantes. El umbral se fija en un valor máximo de 150.000 euros en las poblaciones de más de 100.000 personas y de hasta 120.000 euros en las de menos de esta densidad.
Esta medida se incluye en un código de buenas prácticas para evitar el impacto social de los desahucios y se publicará hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
El código también busca permitir la dación en pago a familias que no puedan afrontar el pago de la hipoteca con el 60 por ciento de todos sus ingresos. El Gobierno además limitará los intereses de moratoria a la suma de los pactados, al contraer la hipoteca (Euríbor) más un máximo del 2,5 por ciento de intereses de demora. "Se pone un limite a los intereses de demora que hoy por hoy en algunos casos eran bastantes exagerados", admitió Sáenz de Santamaría.
Los bancos se podrán acoger a este código de forma voluntaria, si bien una vez aceptadas las condiciones promovidas por el Gobierno su carácter será obligatorio durante al menos dos años y, tal y como concretó la vicepresidenta, los hipotecados podrán recurrir a los tribunales para su cumplimiento. Además, el Ejecutivo constituirá una comisión de seguimiento para garantizar que las entidades comprometidas cumplen con el código. Para ello, emitirá informes semestrales.
En este sentido, la 'número dos' del Gobierno no quiso desvelar qué entidades han decidido acogerse a estas medidas, aunque anticipó que la propuesta ha sido "bien acogida". "Todos tenemos que hacer esfuerzos", aconsejó.
Dentro de los incentivos fiscales previstos por el Gobierno para animar a la banca a incorporarse al código de buenas prácticas figuran bonificaciones fiscales en la novación de la hipoteca para los casos de reestructuración de la deuda, y en las escrituras.