El militar estadounidense acusado de la muerte de 16 civiles en Kandahar, en el sur de Afganistán, el sargento Robert Bales, ha llegado a la base de Fort Leavenworth (Kansas), donde permanecerá encarcelado en una celda en régimen de aislamiento, según fuentes del Ejército norteamericano.
La cárcel de la base militar de Fort Leavenworth es la única prisión de máxima seguridad que dispone el Departamento de Defensa estadounidense en el país. En esta misma instancia penitenciaria se encuentra encarcelado en una celda incomunicada el analista militar Bradley Manning, acusado de filtrar cientos de documentos y cables diplomáticos oficiales a Wikileaks.
"El Ejército confirma que el sargento Robert Bales ha sido transferido a Fort Leavenworth", donde "permanecerá encarcelado a la espera de que se interpongan los cargos", prescribe el mando militar estadounidense en un comunicado. Permanecerá confinado en "régimen de aislamiento en su propia celda", indica el Ejército de Estados Unidos. Bales abandonó el viernes Kuwait, adonde había sido trasladado el pasado miércoles, con destino a Fort Leavenworth, considerada también la principal instalación penitenciaria militar del Departamento de Defensa.
Por otra parte, el presidente afgano, Hamid Karzai, ha denunciado que ninguno de los miembros del equipo de investigación sobre la matanza ha conseguido interrogar al único detenido por la masacre. Asimismo, la comisión parlamentaria afgana encargada de la investigación de la matanza de Kandahar ha implicado este viernes a un total de "entre 15 y 20" soldados estadounidenses en el ataque. De esta forma, contraviene la versión facilitada por Estados Unidos y la OTAN, que insistieron en que fue Bales quien únicamente perpetró el tiroteo, según ha informado el diario 'Afghan News'.
Comisión
La comisión parlamentaria afgana encargada de la investigación de la matanza de Kandahar, en la que fallecieron 16 civiles, ha implicado este viernes a un total de "entre 15 y 20" soldados estadounidenses en el ataque, lo que contradice la versión facilitada por Estados Unidos y la OTAN, que aseguran que únicamente un soldado estuvo detrás del ataque, según ha informado el diario 'Afghan News'.
Fuentes estadounidenses citadas por la agencia británica Reuters han señalado que el militar detenido y acusado de la matanza es el sargento Robert Bales. El sargento ha sido trasladado este viernes con destino a la prisión militar estadounidense de Fort Leavenworth (Kansas) sin que los investigadores afganos hayan tenido oportunidad de preguntarle. El equipo parlamentario ha estado recogiendo declaraciones de testigos, residentes y supervivientes durante dos días.
"Estamos convencidos de que un soldado no puede matar a tantas personas en dos localidades, en una hora y al mismo tiempo, y de que los 16 civiles, la mayoría niños y mujeres, fueron asesinados por dos grupos", ha dicho el investigador Hamizai Lali.