Un atentado perpetrado el domingo presuntamente por un grupo yihadista contra una comisaría situada en la frontera entre Egipto e Israel, en la región del Norte del Sinaí, ha dejado dieciséis policías fallecidos y siete heridos. Por su parte, el presidente egipcio, Mohamed Mursi, convocó una reunión de urgencia con el Ejército para analizar el ataque.
Los asaltantes utilizaron un vehículo policial robado para infiltrarse en la comisaría, donde dispararon indiscriminadamente a los policías destinados en ella, según informaron fuentes del aparato de seguridad egipcio.
"Elementos yihadistas que se infiltraron desde Gaza a través de túneles atacaron un puesto fronterizo de la frontera oriental con la colaboración de elementos yihadistas de las regiones de Al Mahdia y Jebel el Halal", dijo un responsable del aparato de seguridad egipcio citado por la agencia de noticias egipcia, MENA.
En el ataque, el presunto grupo yihadista se hizo con el control de dos vehículos blindados con los que embistieron contra la valla de la frontera para penetrar en territorio israelí. Efectivos del Ejército israelí se han enfrentado a los invasores y la aviación israelí ha bombardeado uno de los dos todoterrenos blindados.
De hecho, el Ejército israelí respondió de inmediato al ataque y nada más cruzar la frontera se produjo un tiroteo. La aviación respondió también con rapidez y el segundo blindado fue bombardeado. El Ejército israelí informó de que al menos tres milicianos han muerto y de que no hay ningún israelí herido.
Después del atentado, las fuerzas israelíes mataron a ocho de los atacantes, que habían intentado cruzar la frontera ilegalmente.
Por su parte, el presidente de Egipto, Mohamed Mursi, convocó una reunión de urgencia con miembros del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas del país para analizar el ataque perpetrado, según el diario egipcio 'Al Ahram'.
No obstante, los Hermanos Musulmanes afirmaron que el ataque y el posterior intento de infiltración en la frontera israelí "puede ser atribuido al Mossad", los servicios secretos israelíes para el exterior.
El objetivo, según afirmó el grupo en su página web, es boicotear el mandato de Mohamed Mursi, candidato de los Hermanos Musulmanes recientemente elegido presidente de Egipto.
Por su parte, el Gobierno israelí desmintió categóricamente que tenga relación alguna con el ataque y el posterior intento de infiltración en la frontera entre Egipto e Israel.