Una multitud de ciudadanos llegados de toda España abarrotaron ayer la madrileña plaza de Colón convocados por la Cumbre Social, encabezada por los sindicatos CC.OO, UGT, CSI-F y USO y con representación de 150 asociaciones y organizaciones sociales, para exigir al Gobierno que dé un giro a su política y convoque un referéndum sobre los recortes que está aplicando.
Bajo el lema 'Vamos! quieren arruinar el país. ¡Hay que impedirlo!', desde primera hora de la mañana, los manifestantes -cientos de miles, según los convocantes- partieron desde diferentes puntos de la capital con dirección a Colón, donde ya a entorno a las 10 horas se concentraban cientos de personas.
Bajo un cielo completamente despejado y sin incidentes, cuatro columnas de manifestantes procedentes de todas las comunidades autónomas y seis 'mareas' de trabajadores de la función pública, la educación, la sanidad o los servicios sociales marcharon con camisetas de colores correspondientes a los diferentes colectivos cantando consignas (menos de las habituales) y portando pancartas, banderas de las distintas comunidades autónomas y globos.
Entre los mensajes más repetidos, 'Esto nos pasa por un Gobierno facha', 'Si quieres ganar lucha sin descansar' o 'La reforma laboral, terrorismo laboral'. Entre estos cánticos, también enviaron mensajes directos al presidente del Gobierno: 'Rajoy no te equivoques, persigue a los defraudadores, no a los trabajadores' o 'la reforma para los políticos'. La subida del IVA, el paro, la amnistía fiscal, los recortes en sanidad y la educación o las ayuda a la banca, también estuvieron presentes entre las pancartas y mensajes lanzados por los ciudadanos congregados ante el escenario de Colón.
"Es el tiempo de devolver la palabra a la ciudadanía", aseguraron los líderes de UGT y CC.OO., Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, quienes volvieron a plantear la posibilidad de convocar una nueva huelga general. "La llave de la huelga general la tiene el presidente del Gobierno", dijeron Toxo y Méndez, para añadir que "esta claro que si hay huelga, que a lo mejor es el desenlace inevitable, la fecha no la va a poner Rajoy".
Méndez subrayó que el seguimiento de esta convocatoria. "Aquí hay mucha gente que no se quiere resignar, que está hasta la coronilla. Nunca con tanta soberbia, con tantas malas artes, se había hecho tanto daño a la inmensa mayoría de la sociedad, porque sólo se protege a las élites económicas y financieras", criticó, acusando al Gobierno de comportarse con "arrogancia y prepotencia" en España y con "sumisión y servilismo" en Europa.
El líder de UGT reprochó que "para este Gobierno no hay nada intocable" y, por eso, "pone en tela de juicio las pensiones, lo que queda del desempleo y los servicios sociales" con el objetivo de "pasar del Estado de Derecho Social al Estado de Beneficencia", lo que supone una "doble operación" para el PP que, por una parte, "facilita negocio con las privatizaciones a sus allegados" y "recupera la figura entrañable de las damas del ropero de la caridad" y, así, se "ganarán el cielo según su religión".
También afeó a los 'populares' que, mientras "se fiscan en su programa ideológico" cuando se trata de rescatar a un banco, "lo llevan hasta las últimas consecuencias" a la hora de atacar los servicios públicos. "Es inmoral pretender aprovechar el ajuste de cuentas del erario público para ajustar las cuentas al Estado Constitucional. Estas medidas son dudosamente constitucionales", dijo
Finalmente, criticó al ministro de Economía, Luis de Guindos, que "ha dimitido mentalmente de su responsabilidad y ha vuelto a recuperar la figura de delegado de Lehman Brothers" y también al presidente, ironizando con que debe de haber sido la "avanzadilla de la sonda del Voyager" y por eso no se había enterado de cómo es la realidad del país.
Marcha HISTÓRICA
En la misma línea, Ignacio Fernández Toxo esperó que Rajoy aproveche las fotos y vídeos de la manifestación para ver "imágenes de la realidad" que dice desconocía y, aunque rechazó entrar en una guerra de cifras sobre los asistentes, aseguró que "hay tantísima gente como en cualquier otro momento" en que se ha dicho que Colón albergaba hasta dos millones de manifestantes.
A renglón seguido, insistió en que hay alternativas a la "anestesia" que el Gobierno está tratando de imponer a la sociedad, y recordó que Grecia, Portugal o Irlanda "no están mejor que antes de mayo de 2010, cuando se inició este camino del suicidio". "Toda Europa sufre las consecuencias de una opción desde la ideología. La rebelión de las élites es lo que está presidiendo los dictados", criticó acusando a los gobiernos europeos y el BCE de actuar según marcan los mercados y haciendo pagar a los ciudadanos.