Rusia ha enviado barcos de guerra al mar Mediterráneo ante una posible evacuación de ciudadanos rusos de Siria, según informó ayer la agencia de noticias Interfax citando a una fuente sin identificar de la Marina.
La fuente ha revelado que un grupo compuesto por dos barcos de asalto, un buque cisterna y un barco que ejerce de escolta zarparon de un puerto del Báltico el lunes. "Se dirigen a la costa de Siria para ayudar en una posible evacuación de ciudadanos rusos (...). Los preparativos para el despliegue se han efectuado a toda prisa y están altamente clasificados", ha explicado la fuente, que ha especificado que los ciudadano evacuados serán trasladados a puertos del mar Negro.
El antiguo ministro de Exteriores Mijail Bogdanov reconoció la semana pasada que los oponentes del presidente Bashar al Assad podrían ganar la guerra civil en Siria y que Rusia estaba realizando los preparativos para una posible evacuación.
intervención militar
El subsecretario general de la Liga Árabe, Ahmed ben Helli, ha descartado la posibilidad de que la OTAN intervenga en el conflicto sirio, durante el encuentro que representantes de ambas organizaciones han mantenido este lunes en El Cairo, según ha informado la agencia de noticias egipcia MENA. Ben Helli ha explicado que la posibilidad de que la OTAN intervenga en el conflicto sirio está "totalmente descartada", en la medida en que los esfuerzos de la comunidad internacional se centran en estos momentos en conseguir una solución política, en lugar de una solución militar.
A este respecto ha revelado que existe una 'hoja de ruta', denominada 'Ginebra 2', que se basa en la declaración emitida el pasado 30 de junio en la ciudad suiza, que contempla la creación de un gobierno interino que no incluya ninguna figura que pueda boicotear la transición política.
El 'número dos' de la organización regional ha detallado que el enviado especial de Naciones Unidas y la Liga Árabe a Siria, Lajdar Brahimi, Estados Unidos y Rusia están negociando la 'hoja de ruta' para acordar la versión final y entregársela al Consejo de Seguridad de la ONU para su aprobación.