Estados Unidos pidió ayer a sus ciudadanos que abandonen Yemen "inmediatamente", además de ordenar la salida del país del personal gubernamental no imprescindible debido a una seria amenaza terrorista en el país árabe.
"Los ciudadanos estadounidenses que se encuentran actualmente en Yemen deben salir", pues la posibilidad de atentados terroristas en Yemen es elevada, reza una nota difundida en la pagina web del Departamento de Estado.
La advertencia se produce tras el cierre el pasado domingo de varias embajadas y consulados de Estados Unidos en Oriente Medio y África debido a la amenaza de atentados de Al Qaeda.
"Como hemos dicho, estamos preocupados por una corriente de amenazas que indica la posibilidad de ataques terroristas contra personas o instalaciones estadounidenses en el exterior, sobre todo procedentes de la Península Arábiga", advirtió la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki.
"Por ello, el Departamento está tomando las medidas adecuadas para proteger a nuestros empleados, incluidos empleados locales y visitantes de nuestras instalaciones", añadió.
Psaki recordó además que los ciudadanos estadounidenses que permanezcan en Yemen a pesar de la advertencia de viaje en vigor "deben limitar los viajes no esenciales dentro del país, ser conscientes de su entorno, en sus residencias, hacer sus propios planes de contingencia de emergencia, inscribir su presencia" en el país y proporcionar su información de contacto de emergencia.
El Gobierno de EE.UU. "insta a los ciudadanos estadounidenses a no viajar a Yemen y a los que viven allí a salir inmediatamente del país", se añade en el comunicado, en el que se insiste en que el nivel de la amenaza contra la seguridad es "extremadamente alto".