A iniciativa del Ayuntamiento local, y tras acordarlo sus vecinos mayoritariamente, la Junta de Castilla y León ha aprobado el cambio de nombre de la localidad burgalesa de Castrillo Matajudíos, que pasará a denominarse Castrillo Mota de Judíos.
El Boletín Oficial de Castilla y León publica hoy el acuerdo de la Junta de Castilla y León que constata ese cambio de nombre, en la línea del sentir del municipio, en el que la mayoría de sus 56 habitantes acordó esa nueva denominación, en una consulta que coincidió con las elecciones europeas del 2014.
La Junta considera que el expediente remitido por el municipio «acredita que el cambio de denominación tiene justificación histórica y que la misma no coincide ni produce confusión con otras denominaciones ya existentes», según el acuerdo recogido hoy por Efe.
Desde el municipio se ha argumentado que el nombre de Castrillo Matajudíos no hacía justicia a un pueblo que desciende de una antigua judería fundada en el siglo XI.
De hecho, el nombre original de Castrillo se completó más tarde con «Mota de Judíos» (lo que significa colina de judíos), hasta que varios siglos más tarde un escriba, por error o por intentar ocultar el origen judío de los vecinos de la localidad en un momento en que había una fuerte persecución racial y religiosa, lo cambió por Matajudíos.
La primera mención a Castrillo Matajudíos aparece en 1623, pero el pueblo nació seis siglos antes, precisamente como asentamiento judío, con el nombre de Mota de Judíos (colina de los judíos), sin que posiblemente se sepa nunca si ese cambio de nombre entre ambos momentos fue un error o intencionado.