La portavoz del Govern, Elsa Artadi, ha informado este martes que el presidente Quim Torra mantendrá el lazo amarillo en la fachada de la Generalitat, tras la petición que la Junta Electoral Central (JEC) le formuló este lunes por segunda vez.
Lo ha dicho en la rueda de prensa posterior al Consell Executiu, después de que la JEC insistiera este lunes, en una nueva resolución, que la Generalitat debe retirar los lazos amarillos de los edificios públicos en un plazo de 24 horas, que finaliza este martes.
Artadi ha añadido que el gabinete jurídico de la Generalitat está preparando otro escrito para la JEC para apelar contra su decisión, y Torra ha pedido al síndic de Greuges, Rafael Ribó, una informe sobre qué debe hacer el Govern en este asunto.
La también consellera de Presidencia ha insistido en que mantener los lazos amarillos en los edificios públicos es una cuestión de defensa de la «libertad de expresión», y considera que la JEC la está poniendo en cuestión al exigir la retirada.
«INSTITUCIONES PROPIAS»
Artadi también ha anunciado que Torra ha pedido al síndic de Greuges que emita un informe sobre qué debe hacer la Generalitat, y ha asegurado que el presidente catalán lo cumplirá aunque eventualmente la conclusión sea que debe retirarlos: «Nos gusten o no se seguirán las recomendaciones del Síndic».
La portavoz ha negado que con este movimiento el Govern trate de pasarle la presión a Ribó: «El síndic ha sido una persona que no se ha escondido de ningún debate y siempre ha actuado con firmeza y ha comparecido en el pleno del Parlament» cuando se le ha requerido.
El Govern ha decidido no aplicar la resolución de la JEC y, por el contrario, sí acatar al Síndic, y Artadi ha defendido que esto responde a la lógica de que la Generalitat debe atender siempre a las consideraciones de «instituciones propias».
LIBERTAD PARA LOS CONSELLERS
Artadi ha explicado que la decisión de mantener el lazo en la fachada es personal del presidente Torra y que él mismo ha dado «libertad» a la consellers para actuar como consideren oportuno en sus respectivos departamentos, pero ha asegurado que hay una posición unánime de todo el Govern de mantener los lazos.
Así, el Govern garantiza que «las 13 sedes de los 13 departamentos actuarán de la misma manera» y así se exhibirá que no hay disparidad de opiniones, y ha recordado que, tanto representantes políticos de JxCat como de ERC, han manifestado que son partidarios de mantenerlos.
FUNCIONARIOS Y MOSSOS
Artadi también ha asegurado que también se dará libertad a los funcionarios sobre si mantener o no lazos amarillos en los edificios: «En ningún caso se dará ninguna instrucción», y ha recordado que para el Govern se una prioridad proteger a los trabajadores públicos.
Lo ha dicho en alusión a los Servicios Territoriales de Educación del Vallès --de la Generalitat--, ya que en este caso la Junta Electoral ha notificado la exigencia de retirar los lazos a un funcionario, y no al conseller en cuestión ni al presidente Torra.
Preguntada por si la justicia requiere a los Mossos d'Esquadra para que sean ellos los que retiren los lazos, ha prometido que el Govern no interferirá en la labor de la policía: «El cuerpo de Mossos hará lo que tenga que hacer sin interferencia».
SUPREMO Y DESOBEDIENCIA
Artadi ha explicado que el Govern no descarta recurrir ante el Tribunal Supremo la decisión de la JEC, pero ha dicho que no hay ninguna decisión tomada y que, en esta polémica, el Govern tendrá que analizar como actúa «minuto a minuto».
La portavoz no ha querido abordar si el hecho de no retirar los lazos puede conllevar una futura inhabilitación de Torra: «Ahora mismo hay un presidente que se llama Quim Torra. Si a la ciudadanía le preocupa tener presidente, tiene uno que es el 131 y que se llama Torra».