La malvasía canela, la avispa asiática en Balears o la rana toro, son ejemplos de que erradicar especies invasoras es difícil pero no imposible en España, según el Ministerio para la Transición Ecológica.
El jefe del Servicio de Vida Silvestre del Ministerio para la Transición Ecológica, Ricardo Gómez, ha explicado a Europa Press que actuar contra las especies invasoras es muy difícil pero se han conseguido algunos éxitos en España cuando se acomete una acción temprana y coordinada.
Este viernes el Consejo de Ministros ha aprobado la incorporación al Catálogo Español de Especies Invasoras de seis nuevas especies, cuya tenencia estará prohibida a partir de 2022. Se trata del cerdo vietnamita, de serpientes pitones, de tortugas de Florida y de varanos de la sabana, así como de dos nuevas plantas.
Gómez ha explicado que el Catálogo es flexible a la incorporación de nuevas especies si así se determina después de la realización de una propuesta, del posterior estudio del comité científico, y la tramitación legislativa necesaria, atendiendo a los criterios por los que se pueda considerar exótica a una especie.
«Esta es la primera actualización del Catálogo de especies invasoras, que hasta ahora incluía 185 especies. No se excluye ninguna, sino que se suman seis más después de la propuesta de inclusión», ha asegurado.
Con la inclusión de estas nuevas especies en el Catálogo no se podrá vender ni comprar alguna de ellas tras la aprobación del Real Decreto en el Boletín Oficial del Estado, pero ha dicho que se concede un amplio plazo para que la población pueda adaptarse.
Una vez que llegue el 1 de enero de 2022, los propietarios podrán conservar a sus mascotas hasta que se mueran, una vez comunicada su tenencia a la comunidad autónoma y la administración fije las condiciones para ello, tales como la obligación de esterilizarlos, marcarlos con anillas o microchips y firmar una declaración responsable en la que el usuario se compromete a no comercializar estos ejemplares.
Estas restricciones, según el jefe de área responde a la necesidad de establecer mecanismos de control» porque «es complicado» controlar y erradicarlas, sobre todo cuando se trata de especies muy difundidas y extendidas, como por ejemplo el cangrejo rojo.
De hecho, en Andalucía se mantiene la posibilidad de comercializar ejemplares muertos, procesados. Se capturan vivos en las marismas del bajo Guadalquivir para su posterior procesamiento de acuerdo a una autorización en el marco de un plan de control y erradicación de la Junta de Andalucía.
CASOS DE ÉXITO
Así, admite una vez más la «complicación» de luchar contra estas especies, pero ha defendido que también hay casos de éxito cuyos beneficios son positivos.
Uno de esos ejemplos de «éxito» ha sido la erradicación de las carpas en la laguna de Zoñar, en Cordoba que dio lugar a la posterior recuperación del medio natural de la flora y fauna.
Sin embargo, Gómez ha subrayado que actuar a nivel nacional es «muy difícil», en primer lugar porque la competencia en este sentido es autonómica.
En el caso de la avispa asiática, con su continua progresión en España, se ha aprobado una Estrategia nacional de control y erradicación que coordina el Ministerio de Transición Ecológica, a través del seguimiento que realiza el grupo de trabajo de especies invasoras.
Aunque la avispa asiática sigue avanzando por la Península, causando daños a la biodiversidad nativa y a los intereses socioeconómicos, en particular a la apicultura, hay varias estrategias de erradicación y ha celebrado que Baleares se puede poner de ejemplo de «caso de éxito» porque ha comunicado que la especie está «tan controlada» que se cree que posiblemente se ha erradicado en las islas. A nivel nacional, ha asegurado que el Ministerio está buscando una mayor coordinación para transmitir a todas las comunidades autónomas las acciones que funcionan sobre el terreno.
Otro ejemplo de exitosa erradicación de una especie exótica es del de la malvasía canela, un ave de origen jamaicano que llegó por escapes de colecciones privadas de otros países de Europa y que en España afectaba a la malvasía cabeciblanca (autóctona). En España como en otros países de Europa se ha coordinado una acción importante y se han disminuido los avistamientos.
«A día de hoy es raro en España el año que hay una o dos avistamientos. Esto es un éxito que se debe a una reacción rápida, conjunta y coordinada», ha comentado.
Del mismo modo, la rana toro, detectada en 2018 en el delta del Ebro es otro de los «éxitos», el más reciente, en la erradicación de especies invasoras y confía en que el resultado se verá «este año, en primavera», después de las intensas actuaciones que se realizaron en 2018, ya que en invierno se esconden. «Se hicieron las actuaciones adecuadas», ha confiado.
En este contexto, ha avisado a la población de que existe obligación y responsabilidad legal de no liberar especies exóticas en el medio ambiente, pero tampoco ninguna especie autóctona.
A su juicio, las especies que realmente funcionan como mascotas son las que están adaptadas a vivir con el hombre desde hace muchos años, como perros o gatos, pero no ve el «beneficio» de tener en casa una culebra o un lagarto que hay que tener en un terrario con los problemas añadidos que sus cuidados requieren, su peligrosidad, las enfermedades que transmiten y el riesgo de que se escapen.