La mayoría de los portavoces políticos en el Congreso de los Diputados regresará a su residencia habitual en Navidad, con medidas de seguridad para evitar contagios de la COVID-19, aunque hay excepciones, como el dirigente de Unidas Podemos Pablo Echenique, que se quedará en Madrid.
Los portavoces de los principales partidos políticos en la Cámara Baja tienen su residencia habitual fuera de la capital española, donde desempeñan su labor parlamentaria, y planean ya sus viajes para disfrutar de las navidades junto a los suyos pese a la pandemia.
Es el caso de la portavoz del PSOE, Adriana Lastra, que regresará a Asturias, donde no acude desde septiembre ante la situación sanitaria.
Cuando acabe el último pleno la dirigente socialista cogerá su coche para pasar las navidades con su familia y se hará una prueba para saber si ha pasado el coronavirus y descartar una infección activa.
La nochebuena la pasará en familia, guardando dos metros de distancia en la cena, con ventanas abiertas y mascarilla cuando sea posible.
«Esta es una Navidad especial y debemos ser todos responsables, pero es bueno también tener la oportunidad de, cumpliendo, disfrutar de la familia», ha señalado por su parte la portavoz de los 'populares', Cuca Gamarra, a quien esperan en Logroño.
Laura Borràs, portavoz de JxCat y candidata de este partido a las elecciones catalanas, pasará también las fiestas navideñas en compañía de su familia, que, al ser muy reducida, según ha explicado, cumplirá sin problemas las restricciones sanitarias.
Entre los españoles que renunciarán a reunirse con los suyos figurará en cambio el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, que sí tendrá encuentros en Madrid, pero no visitará a sus padres en Zaragoza a la espera de que mejore la situación epidemiológica y pueda haber una vacuna.
Aunque ha insistido el dirigente morado en que no entraría en lo que hagan los demás porque cada familia es distinta, al tiempo que ha pedido prudencia a los ciudadanos y ha celebrado un vídeo de Angela Merkel que dice «unas cuantas verdades» sobre la conveniencia de extremar la prudencia en las fiestas. «Conviene esperar un poquito y abrazarnos más tarde», ha añadido.
El portavoz de Vox en la Cámara Baja, Iván Espinosa de los Monteros, representa en cambio a ese porcentaje de los españoles que aún no sabe cómo celebrará las fiestas, una situación de la que culpa a «los gobernantes»
«Estoy como tantos españoles en la situación de no poder hacer planes hasta el último minuto porque por desgracia carecemos de capacidad de planificación dado los vaivenes normativos que estamos padeciendo», ha señalado Espinosa de los Monteros en rueda de prensa.
Unos y otros deberán estar pendientes de la forma en la que cada comunidad autónoma aplica las recomendaciones fijadas en el Consejo Interterritorial de Sanidad, entre las que figuran posponer el toque de queda hasta la 1.30 horas en Nochevieja y en Navidad o cerrar los territorios, salvo para desplazamientos de familiares y allegados.