El alcalde de la localidad madrileña de Batres, Víctor Manuel López Rodríguez, ha reculado en su decisión de suspender los pagos a las compañías que suministran energía al ayuntamiento ya que la subida del precio de la electricidad «no afectará en los próximos meses a su facturación» por un acuerdo suscrito con Iberdrola que el propio regidor desconocía.
Este martes, el alcalde de Batres (municipio de unos 1.700 habitantes situado al sur de la comunidad) anunció que iba a suspender los pagos a las compañías que suministran energía al ayuntamiento por el «abuso» en los precios de la electricidad, «priorizando otros pagos para garantizar los servicios públicos municipales, pero ha dado marcha atrás en su decisión.
El cambio se ha producido después de que la compañía eléctrica se mostrara «sorprendida» ante el anuncio del alcalde pues la tarifa eléctrica del ayuntamiento «no está sujeta a la volatilidad diaria y su precio es tres veces menor que el que cotiza el mercado hoy».
Iberdrola ha recordado en un comunicado que el Ayuntamiento de Batres tiene contratado el suministro eléctrico «bajo las condiciones de un acuerdo marco firmado con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) en virtud del cual el precio es fijo, no sujeto a la volatilidad diaria del mercado mayorista de electricidad».
Este acuerdo, según Iberdrola, «permite a más de 8.100 municipios españoles licitar sus contratos de electricidad», entre ellos Batres, con un precio mensual que es «al menos tres veces menor que el precio al que cotiza hoy el mercado de electricidad».
Además, la compañía eléctrica señala que el municipio de Batres mantiene una deuda con ellos.
El alcalde ha asegurado que esta información no se la habían trasladado «hasta hoy» los técnicos municipales, por lo que ruega que «disculpen su falta de conocimiento» ya que -recuerda- ostenta el cargo «desde el 6 de octubre del 2020» y el acuerdo marco con Iberdrola se firmó en marzo de ese mismo año.
Aún así, ha subrayado en un comunicado que se ratifica en su queja sobre «los perjuicios que la continuada especulación de precios de las compañías eléctricas están causando a la sociedad española y en especial a las economías más humildes».