El año 2021 termina con al menos 43 mujeres víctimas mortales de la violencia de género -a falta de dos días para el cierre del ejercicio-, la cifra más baja registrada desde que se comenzaron a recopilar datos sobre esta lacra, en 2003.
Por el contrario, se ha duplicado el número de menores asesinados por violencia de género, que pasa de los 3 contabilizados en 2020, a los 6 registrados este año. Además, 30 niños se quedaron huérfanos de madre por esta lacra en 2021. Precisamente, uno de los objetivos de PSOE y Unidas Podemos para el próximo año es incorporar a la Ley Integral contra la Violencia de Género el término 'violencia vicaria', que es el que se ejerce contra los familiares para hacer daño a la víctima y que ya recoge la norma aunque no con este nombre.
Así, este año se ha contabilizado a cuatro asesinadas menos que el año 2020, y hasta 30 menos que las 73 que se contabilizaron en 2010, que es, hasta ahora, el año más dramático de la serie histórica, según los datos del Ministerio de Igualdad.
Estas cifras también destacan que, de las 43 asesinadas, 26 convivían con su agresor y 21 mantenían una relación de pareja con él. Además, la mayoría de ellas (15) tenían entre 31 y 40 años y otras 10 entre 41 y 50. También en su mayoría, 24 de las 43 asesinadas, tenían nacionalidad española.
Sin embargo, uno de los aspectos que más ha destacado en este 2021 es la denuncia. Pero no la ausencia de ellas --solo 9 de las víctimas habían interpuesto una contra su agresor por violencia de género-- sino por el hecho de que mujeres que habían acudido a pedir ayuda a las instituciones acabaran asesinadas.
Renovación del Pacto de Estado
En el mes de mayo, y en un corto periodo de tiempo, dos mujeres que sí habían denunciado su situación fueron asesinadas por sus parejas o exparejas, lo que llevó a la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha convocar por primera vez desde su aprobación, en 2017, al Pacto de Estado contra esta lacra con el objetivo de «evaluar» y «reflexionar» sobre lo ocurrido.
Con este primer encuentro se inició un proceso de modernización y actualización de este acuerdo del que, según ha informado Igualdad, se descubrió que había protocolos sin evaluar durante años. Así, Montero llamó a las fuerzas políticas a «blindar» este Pacto y, finalmente, el acuerdo volvió a firmarse el 25 de noviembre de este año, con el apoyo de todas las fuerzas políticas en Congreso y Senado, a excepción de Vox.
Entre las novedades del acuerdo que se han incluido con esta nueva firma, está legislar para combatir las violencias machistas digital, vicaria y económica, hacer campañas de sensibilización contra el maltrato destinadas a los hombres y blindar una financiación «estable, suficiente y adecuada», entre otras.
No ha sido la única medida que en materia de violencia de género se ha tomado en este último año. En marzo, el Ministerio extendía los servicios de atención y asesoramiento del 016 (telefónico, online y whatsapp) a la violencia contra las mujeres fuera del contexto de la pareja o expareja, incluyendo así la violencia sexual o el acoso, entre otras.
En agosto de 2021, las llamadas a este servicio sumaron un millón tras 14 años en funcionamiento y en marzo, la atención en el 016 se disparó hasta un 61%, con respecto a las cifras del mes anterior, en los días posteriores a la emisión del testimonio de Rocío Carrasco, contando las situaciones vividas con su exmarido.
«Siempre que existe una campaña», «un programa» o un «caso con proyección mediática», es cuando «muchas mujeres se autoidentifican» con la violencia que «en estos escenarios se denuncia o se muestra», explicó la delegada de Gobierno contra esta lacra, Victoria Rosell.
Del mismo modo, este año se ha aprobado la modernización, a través de los fondos europeos, de los dispositivos que se usaban para el sistema Atempro. Un servicio que da protección a las mujeres víctimas de violencia de género, especialmente en el ámbito rural. Además, este servicio también se extenderá a otras violencias machistas.
Contabilidad de feminicidios
Esta extensión de las políticas a otras violencias sobre las mujeres cumplen con el mandato del Convenio de Estambul, ratificado por España en 2014. Y, en este sentido, Igualdad también ha anunciado que en 2022 comenzará a contabilizar e incluir en las estadísticas los feminicidios según diferentes categorías. De esta forma, distinguirá entre feminicidios en pareja o expareja, familiares, sexuales, sociales y vicarios.
De este modo, España se convertirá en el nuevo año, según ha explicado la ministra de Igualdad, en «el primer país de Europa en contabilizar de forma oficial» en las «estadísticas gubernamentales» los feminicidios que se cometen en el país.
El objetivo es «detectar el alcance» de «la forma más extrema de violencia» que se ejerce contra la mujer, el asesinato, e «identificar las políticas de prevención, detección precoz, erradicación y reparación» ante esta lacra, según ha indicado la responsable de Igualdad.
2022 será también el año en el que las CCAA deberán desarrollar en todas sus provincias un centro de crisis de atención 24 horas a las víctimas de violencia sexual y que, según la normativa puesta en marcha por el Ejecutivo, deberán estar listos en 2023.