La decisión del Gobierno de destituir a la jefa de la inteligencia española tras confirmarse las escuchas autorizadas por un juez a destacados líderes independentistas ha obrado un milagro singular, y es que las tres principales almas del independentismo catalán se han puesto de acuerdo para calificar de insuficiente este gesto en su intento de dar carpetazo al escándalo de espionaje con 'Pegasus'.
En primer lugar la portavoz y secretaria general adjunta de ERC, Marta Vilalta, ha avisado este martes de que la destitución de la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban, no es «suficiente» como respuesta al espionaje a dirigentes independentistas con el software Pegasus.
«Si me preguntan si es suficiente, les diré que no», ha advertido en rueda de prensa, en la que ha recordado que han pedido responsabilidades políticas en forma de dimisiones pero también transparencia, información y la garantía de que estos hechos no se están produciendo ni se volverán a producir. Vilalta ha llamado a desplegar una «agenda antirrepresiva necesaria e imprescindible para salir de la persecución y de la guerra sucia del Estado, y apostar por la política, por la democracia y por la defensa de los derechos fundamentales».
Su presidente, Oriol Junqueras, ha exigido «máxima transparencia» y «máximas garantías» de que los espionajes a políticos independentistas no se «reproduzcan» y ha asegurado que es «normal» que se asuman responsabilidades. «No es cuestión de lo que me valga o no a mí ante situaciones tan graves como un espionaje masivo», ha afirmado el dirigente de Esquerra, quien ha sostenido que «es el Gobierno el que debe trabajar para restaurar la confianza de la sociedad y de los demócratas, que exigen, con razón, saber que no son espiados».
En el caso de la CUP, su diputada en Madrid Mireia Vehí también ha considerado «insuficiente» la destitución de la directora del CNI y ha señalado a quienes le daban órdenes, en referencia a la ministra de Defensa, Margarita Robles, y al propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. En rueda de prensa, Vehí ha lanzado preguntas al aire sobre si el Gobierno controla o no al CNI o si los servicios de Inteligencia u otros estamentos están investigando al Ejecutivo.
«Si no fuera tan grave, sería una mala película de espías», ha sentenciado. Su conclusión es que el cese de la directora del CNI es «una cortina de humo» que no les basta y considera que Paz Esteban sólo es «una cabeza de turco», ya que Robles es «la responsable política» y el presidente del Gobierno, según dice la ley, está al tanto de las actividades de los Servicios de Inteligencia. «Se cargan a la que cumple órdenes y ellos que las dan ¿qué pasa? -se ha preguntado-. Que den la cara».
En términos similares se ha expresado el portavoz del PDeCAT en el Congreso, Ferran Bel, quien ha avisado este martes de que la destitución de Esteban no es ni «suficiente» ni «políticamente relevante», y ha vuelto a exigir al Gobierno que dé explicaciones sobre el espionaje a independentistas y se abra una investigación parlamentaria.
El apunte
Revelación de secretos
A su vez, el portavoz de los republicanos en el Congreso, Gabriel Rufián, ha quitado importancia a la denuncia que Ciudadanos ha presentado contra él por haber revelado supuestamente información 'secreta' de la comparecencia de la directora del CNI sobre el espionaje a políticos con el programa 'Pegasus'.
«Si hubiera revelado un secreto ustedes lo sabrían, es kafkiano todo», ha apuntado, poniendo en duda que el partido naranja pueda afrontar las costas de un juicio por su situación actual.