El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha soltado de forma simbólica el timón del PP gallego poniéndose «a la orden» del «presidente Rueda», como se ha referido al nuevo jefe de filas de los populares gallegos, Alfonso Rueda, al que ha puesto, en todo caso, sus primeros deberes electorales: «mejorar» los resultados en las municipales del año próximo como paso previo a lograr «la quinta mayoría absoluta» consecutiva y estar «preparados» por si hay un adelanto de las generales. Feijóo ha intervenido este domingo en la clausura del 18º Congreso autonómico del PPdeG, que ha dado por cerrado su relevo también en el partido, puesto que Rueda tomó posesión como presidente de la Xunta hace una semana y la sucesión ya se había zanjado en el plano institucional.
En un escenario con una importante carga «simbólica» para él, como ha reconocido en su discurso, en el que se ha mostrado emocionado en varias ocasiones, Feijóo ha recordado las «muchas páginas de Rueda» que se han escrito ya en los últimos días con diversas metáforas como que el dirigente pontevedrés es «un corredor de fondo» o su «escudero fiel». «A mí, sabiendo que a Alfonso le gusta el deporte y la política, y que la política es un deporte de responsabilidad, preparación y servicio, me gustaría decir que es un triatleta porque conoce desde hace décadas el funcionamiento de los ayuntamientos y de la administración, se afilió antes que yo, lo que acredita que es una persona de partido, y es un gran tipo», ha remarcado.
«Y eso, conocer la sala de máquinas de la Administración, conocer orgánicametne el PPdeG y conocer todo esto siendo un buen tipo no ocurre todos los días. Para mí es un honor dejar de llamarle Alfonso para empezar a llamarle presidente Rueda y ponerme a la orden», ha añadido Feijóo. En esta coyuntura, ha recuperado la famosa frase que Manuel Fraga pronunció sobre el liderazgo de José María Aznar y ha proclamado que deja manos libres a Rueda. «No hay tutelas ni hay tutías, aquí hay un presidente del partido, un líder del equipo y un proyecto», ha proclamado, convencido de que el fallecido Manuel Fraga estaría «contento» de ello. Asimismo, ha dado las gracias por su «generosidad» a los líderes provinciales por favorecer una sucesión fraguada «en tan corto espacio de tiempo» y ha llamado a permanecer «unidos» como clave para mantener los éxitos electorales, con las municipales del año próximo como primer reto. Pero también ha pedido «estar preparados» por si hay un adelanto de las generales. Y todo ello con el objetivo último de lograr una nueva mayoría absoluta, la quinta consecutiva, en 2024 en Galicia.