El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha comprometido este lunes ante la OTAN a incrementar el gasto militar y ha pedido a los españoles comprender que es «imprescindible» hacer este esfuerzo si se quiere preservar la seguridad y la estabilidad del modelo democrático. El acto institucional por el 40 aniversario de la entrada de España en la OTAN, celebrado en el Teatro Real de Madrid, ha sido el marco donde Sánchez ha lanzado este mensaje en presencia del secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, y de los representantes de los 30 países que integran el pacto militar.
«Voy a transmitir a los españoles que debemos hacer ese esfuerzo, porque mucho mayor es el coste de quedarse de brazos cruzados, mientras se pone en jaque lo más elemental, lo más fundamental de nuestra sociedad, como es la libertad y nuestro modelo de convivencia pacífica y democrática», ha proclamado Sánchez. Al acto han asistido más de 300 invitados, entre los que no ha habido ningún ministro ni representante de Unidas Podemos por su postura crítica con la OTAN y con la celebración en Madrid de la próxima cumbre de la organización a finales de junio.
Además de ocho ministros, han estado los expresidentes del Gobierno Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero; el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y cuatro ex secretarios generales de la OTAN, entre ellos, Javier Solana. La decisión de Rusia de invadir Ucrania, según Sánchez, «ha abierto los ojos» a la sociedad europea y española de que «la unidad es esencial» para mantener la seguridad y de que ésta «no está garantizada de forma indefinida».
«Cuando la seguridad está en peligro, todos sus fundamentos corren el riesgo de colapsar», ha advertido el jefe del Gobierno. Ha hecho hincapié en que para hacer frente a amenazas como la de Rusia, «es imprescindible reforzar las capacidades de disuasión», lo que «va a exigir capacidades militares modernas, capaces y disponibles que sólo se adquieren con un aumento de la inversión en defensa». «Somos muy conscientes de ello (...) No hay otro camino. Si queremos ofrecer un legado de libertad y democracia a las futuras generaciones, hay que tomar decisiones que refuercen nuestra alianza y la doten de las herramientas y capacidades adecuadas para abordar lo desafíos que tenemos por delante», ha remarcado.
El presidente no ha dado detalles de su plan de elevar la mayor inversión militar, ni cuál va a ser el volumen de gasto que recogerán los presupuestos para el próximo año. La partida de defensa del presente ejercicio representa el 1,03 por ciento del PIB, lo que sitúa a España entre los países de la OTAN que menos invierte en este terreno, y la meta que se ha marcado el Ejecutivo es duplicarla en 2024. El acto de hoy ha sido la antesala de la cumbre del 29 y 30 de junio en Madrid, que supondrá la primera visita a España del presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Para Sánchez, esta cita es «una gran oportunidad de mostrar a los españoles las ventajas de estos 40 años de pertenencia a la organización», fundada en 1949. Felipe VI ha convenido en que la adhesión de España a la OTAN fue «un paso histórico tras la ejemplar transición hacia una sociedad democrática y moderna», además de marcar su posición futura como «Estado responsable de la comunidad internacional».
El monarca ha afirmado que España «no escatimará esfuerzos para garantizar su éxito» y contribuirá a que la organización sea «más fuerte, más inteligente, más eficiente y mejor preparada y equipada» frente a las actuales amenazas. Para lograr esta meta, ha abogado por la asociación efectiva entre la OTAN y la UE al compartir ambas los mismos desafíos. Felipe VI se ha hecho eco del deseo del Gobierno de que la nueva estrategia de los aliados incluya el flanco al sur del Mediterráneo ante la amenaza que representa el terrorismo yihadista y otros actores «estatales y no estatales» que no comparten los valores democráticos.
Stoltenberg ha elogiado el papel de España en la OTAN durante las últimas cuatro décadas: «Ha contribuido enormemente a nuestra alianza». El secretario general de la Alianza Atlántica se ha mostrado convencido de que la cumbre de Madrid será «histórica» porque supondrá «resetear la disuasión y la defensa» de los territorios aliados ante un mundo con «más peligros» y nuevos desafíos, agravados por la invasión rusa de Ucrania.
El acto conmemorativo, que se ha abierto con la interpretación de una pieza de Beethoven por parte de la Orquesta Sinfónica de Madrid, se ha completado con una comida ofrecida por los reyes en el Palacio Real, con una asistencia limitada a algo más de una docena de autoridades.