En algún momento de los últimos 15 años, el País Vasco se convirtió en un agujero negro para el PP. Alberto Núñez Feijóo quiere frenar una espiral de desconexión con la sociedad vasca que tocó fondo en abril de 2019, cuando el PP se quedó sin diputados vascos en el Congreso. La machada en la repetición electoral de noviembre fue conseguir el escaño por Vizcaya, el de Bea Fanjul, el único de los 19 en liza.
La intención de Feijóo es pasar página, actualizar con tacto el discurso y basarlo en una "alternativa de gestión" al PNV. Así lo manifestó tanto en público como a puerta cerrada a los miembros de la Junta Directiva del PP vasco. El líder de la oposición recalcó la "honra hasta las últimas consecuencias" que habían demostrado muchos miembros del partido en los años de plomo, pero puso la primera piedra para desviar el eje nuclear del mensaje. La estrategia de la nueva dirección será impregnar el discurso de los populares vascos con economía, descafeinarlo de ideología e intentar seducir al electorado moderado con un proyecto autonomista basado en la "política útil". Un despliegue paralelo al trazado en Cataluña, adonde se desplazó el viernes.
"Quiero un PP que se dirija a la mayoría de la sociedad vasca, que sepa que nosotros estamos aquí para defenderles, para un proyecto común, que sepan que estamos orgullosos de la Constitución Española, de la Transición española y del Estatuto de Guernica", defendió Feijóo en Bilbao junto al líder del partido en el País Vasco, Carlos Iturgaiz. "Si pensamos que el problema de Euskadi es un problema ideológico o rupturista, nos equivocamos", dijo.
La "leyenda" del PNV y la fragmentación
En la cúpula del PP son conscientes de la magnitud del reto. Reavivir las pavesas de un constitucionalismo abocado a la practicidad y a la rentabilidad del voto al PNV, el perejil de todas las salsas en la geometría parlamentaria, requiere el diseño de un mensaje eficaz. "En Euskadi no todo puede ser España sí o España no. Igual que en Cataluña, no todo puede ser la eterna dicotomía entre sensibilidades territoriales", argumentan fuentes de Génova. En el PP fían todas las posibilidades de éxito a erigirse en esa "alternativa de gestión" a los nacionalistas vascos.
Fuentes del PP vasco defienden a 20minutos que siempre han sido "autonomistas" y "foralistas". "El mensaje de alternativa de gestión es acertado", refrendan, "con todas las transferencias que tiene el País Vasco, y especialmente en Hacienda, la joya de la corona no es otra que el concierto económico, y es donde peor estamos".
Fue precisamente la fiscalidad el flanco por el que Feijóo atacó al lehendakari Iñigo Urkullu, con quien reconoció tener una relación basada en la "confianza" y la "proximidad". Es una de esas relaciones en las que el líder del PP ha tenido que hacer de zapador respecto a la anterior etapa. Además, ambos han sido homólogos durante una década. "La gestión es un valor-refugio", insisten las fuentes, con la que disputar el voto al PNV.
En el PP vasco achacan la sangría de votos de los últimos años a dos cuestiones principales: "La costumbre de votar la leyenda de un PNV que gestiona bien y a un centroderecha fraccionado en tres partidos". "Con Ciudadanos de capa caída, esperamos que los votantes entiendan que, especialmente aquí, no podemos dividirnos", argumenta una dirigente. Las mismas fuentes describe unos cuadros internos contentos con el liderazgo de Iturgaiz, a quien le reconocen "un esfuerzo titánico cogiendo las riendas del partido en el peor momento, con una salida traumática, a las puertas de unas elecciones". Sin embargo, el líder del PP vasco es uno de los dirigentes territoriales todavía por validar por Génova.
Homenaje a Miguel Ángel Blanco
A puerta cerrada, Feijóo transmitió la necesidad de "trabajar en conjunto" y recalcó la libertad de la dirección autonómica y las tres provinciales para configurar las listas de cara a las elecciones municipales de mayo de 2023. "Vosotros sois los que estáis aquí y los que mejor conocéis el terreno", les dijo en privado el líder del PP a los miembros de la Junta Directiva. Elías Bendodo, coordinador general, y Miguel Tellado, vicesecretario de Organización, son el enlace con los territorios. "Estarán encima de todos pero para bien", estiman las fuentes. Feijóo instó públicamente a "reforzar nuestra presencia en todos los pueblos de Euskadi" y "tener la humildad y la fortaleza para presentarnos".
El líder del PP volverá en pocos días al País Vasco con motivo del 25 aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco, concejal del PP en Ermua secuestrado y asesinado por ETA en julio de 1997. El vicesecretario de Institucional del partido, Esteban González Pons, puso en duda este viernes la presencia del presidente del Gobierno por el reciente pacto con Bildu. La extensión de los efectos de la Ley de Memoria Democrática hasta el 31 de diciembre de 1983. "¿Asistirá Pedro Sánchez al homenaje por el 25 aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco después de haber pactado la memoria democrática de España con Bildu? No creo", tuiteó.