El presidente electo de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha acusado este jueves al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de «podemizarse» a través de los anuncios realizados durante el Debate del estado de la Nación, tales como nuevos impuestos a los beneficios de las eléctricas o de los bancos, «para intentar aguantar esta legislatura». «Es un viraje más», ha sostenido. Moreno se ha expresado así en declaraciones a periodistas en Sevilla, momentos antes de la constitución del Parlamento de la XII Legislatura, en la que el PP-A contará con mayoría absoluta.
Desde allí, ha tachado de «error» esa nueva carga impositiva anunciada en el Congreso de los Diputados porque «va a repercutir, como ya hemos visto en experiencias anteriores, en el conjunto de los ciudadanos». «Creo que al final el señor Sánchez está pensando más en aguantar un año y medio de legislatura que pensando en los intereses generales de los andaluces en los próximos cuatro o seis años», ha comentado, y en ese sentido ha definido los anuncios del Debate como «un viraje más» del presidente del Gobierno.
«Hace tan solo diez meses el señor Sánchez nos hablaba de la socialdemocracia en su congreso federal (del PSOE), y ahora una vez más vemos cómo se podemiza en función de los intereses, en este caso electorales que tienen para intentar aguantar esta legislatura», ha sostenido. El presidente electo ha concluido afirmando que «España necesita rigor, seriedad y consenso para buscar iniciativas de calado político» para «intentar sacar» al país «de la situación que tenemos y de la crisis que podíamos tener».
El clave autonómica Moreno ha apostado este jueves, cuando se constituye la XII Legislatura andaluza, por una etapa en la que «todo sea dialogado» y se puedan alcanzar iniciativas «con amplio respaldo», sin que parezca que tienen que ejercer su «mayoría suficiente». Moreno, que cuenta con mayoría absoluta en la Cámara con 58 diputados, ha asegurado que afrontan la nueva legislatura «con una ilusión desbordante» pero al mismo tiempo con una «enorme responsabilidad» por no defraudar a sus votantes ni a los 8,5 millones de andaluces, a los que ha garantizado que van a gestionar «con moderación» y de manera «inclusiva».