Junts ha asegurado este miércoles que en la reunión extraordinaria del Govern sus consellers han defendido «de manera unánime» que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, se someta a una cuestión de confianza si no cumple el acuerdo del Ejecutivo, pero fuentes de Presidencia lo han negado y afirman que ha habido divergencia de opiniones. En un comunicado, Junts ha afirmado que sus consellers han apostado de forma unánime «por el cumplimiento del acuerdo firmado entre Junts y ERC para garantizar la estabilidad y la lealtad del Ejecutivo, en la misma línea que expresó ayer el grupo parlamentario, tanto por lo que respecta al acuerdo de Govern como a la cuestión de confianza».
Sin embargo, fuentes de Presidencia han sostenido que los consellers de Junts han dado una respuesta irregular y «divergente» cuando Aragonès les ha preguntado si sabían que se plantearía una cuestión de confianza y si están de acuerdo con que se haga. Según estas fuentes, el presidente quería que la reunión del Govern sirviese para aclarar si los consellers de Junts defienden esta cuestión de confianza y han subrayado que la sensación con la que ha salido del encuentro es «que no ha habido una definición clara», aunque no han concretado qué posición ha tenido cada conseller.
Los consellers de Junts han insistido en sus tres demandas para que se cumpla el acuerdo del Govern --establecer una dirección de coordinación estratégica del independentismo, que la mesa de diálogo se centre exclusivamente en la autodeterminación y la amnistía, y que ERC y Junts se coordinen en el Congreso-- y han subrayado que son tres cuestiones importantes para ellos. En cambio, fuentes de Presidencia defienden que Aragonès ya expresó en el Debate de Política General del martes que estaba dispuesto a hablar sobre ello.