Los sindicatos CCOO y UGT han acusado al Tribunal Constitucional de intentar «obstruir» el «normal desarrollo de la actividad legislativa», al convocar un pleno para decidir si paralizaba la tramitación de los cambios en el Poder Judicial y en el propio Tribunal Constitucional que debatía este jueves el Congreso.
En un comunicado conjunto, ambos sindicatos han criticado la «tensión a la que se han visto sometidas las instituciones democráticas» este jueves al intentar impedir una reforma de los órganos judiciales, que ven «ineludible y más necesaria que nunca». CCOO y UGT han advertido de que la eventual paralización de la reforma en el Congreso, donde «se encuentran los representantes legítimos del pueblo español», por parte de un tribunal con magistrados «con un marcado sesgo ideológico afín a la oposición», el mandato caducado y «bloqueando su renovación», hubiera sido «inaceptable».
Así, confían en que, en el futuro, el Tribunal «se abstenga de realizar injerencias» que dañen la calidad democrática del país, ya afectada por cuatro años de bloqueo en el Consejo General del Poder Judicial y el propio Constitucional, en relación a un poder legislativo que es «elegido directamente por la ciudadanía». «La derecha política y judicial debe respetar la división de poderes del Estado», zanjan ambos sindicatos, ya que con el bloqueo de la renovación de los órganos judiciales «manifiestan claramente su desprecio al respeto institucional entre los poderes del Estado y al resultado de las urnas que se inclinan hacia una composición progresista en esas renovaciones».