El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha justificado su ausencia del debate de la moción de censura de Vox asegurando que no se va a prestar a «este tipo de juegos» que «desprestigia» las instituciones.Dicho esto, ha censurado la «política infantil y populista» que, a su juicio, se ha visualizado esta semana en el Pleno del Congreso durante el «esperpento» de moción que presentaba al economista Ramón Tamames como candidato.
«Yo ofrezco una España normal y una política para adultos», ha proclamado en una comparecencia ante los medios en Bruselas, tras asistir a la reunión del Partido Popular Europeo (PPE), previa al Consejo Europeo. Tras verse anoche con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, el jefe de la oposición se ha reunido también con el presidente de Letonia, Arturs Krisjani, y el presidente de Les Republicains, Éric Ciotti, entre otros.
Feijóo considera que en el «espectáculo» de la moción ha quedado «claro» que hay «dos visiones distintas de la política» y ha admitido que en su visita a Bruselas sus «colegas» del PPE le han preguntado «en qué consistía este asunto».
Además, ha justificado su ausencia asegurando que no se va a prestar a «este tipo de juegos» que «desprestigia» las instituciones. «No comparto esta forma de hacer política y, por tanto, me he abstraído de este esperpento que hemos vivido en nuestro país y me he dedicado a reforzar la alternativa, a reconstruir la imagen internacional de España y a hacer una política que es la que se merece España», ha aseverado.
El líder del PP ha afeado al presidente del Gobierno que aprovechara su intervención para dar un «macro mitin» y que su vicepresidenta Yolanda Díaz lo haya utilizado para «apropiarse» de Podemos. Según Feijóo, «en este simulacro» de moción lo que han visto que el «apego al cargo» es el «único pegamento de la coalición de Gobierno rota».
Y el PP, ha proseguido, no se va a prestar a «apuntalar al Gobierno» ni a hacer «seguidismo» de partidos como Vox sino que sigue su propio «camino» y «agenda». «España merece pasar página y rápido de estos cuatro años de frivolidad y populismo, mezclado con el independentismo, y volver a la política seria», ha apostillado, para recalcar que él «no va a vender a los españoles una arcadia feliz» porque para eso «ya está el populismo actual» que hay en el Gobierno y en algunos partidos de la oposición.