La percepción de la importancia de las vacunas infantiles en España ha disminuido 8 puntos durante la pandemia, pasando del 96,5% a un 88,6%, según el informe «Estado Mundial de la Infancia 2023» de Unicef, que alerta de que unos 67 millones de menores se quedaron sin vacunar entre 2019 y 2021. Es una cifra equivalente a la población de Reino Unido, ha advertido José María Vera, director ejecutivo de Unicef España en la presentación de este informe en Madrid, en la que ha resaltado que se trata del «mayor retroceso sostenido de la inmunización infantil de los últimos 30 años», y se ha registrado en 112 países. Esta situación ha provocado que en 2022 se haya duplicado el número de casos de sarampión, y que haya aumentado en un 16 % la cifra interanual de menores paralizados por la poliomelitis. Si se compara el periodo 2019-2021 con el trienio anterior, se multiplicó por ocho la cifra de menores que sufrieron parálisis a causa de poliomielitis, lo que pone de manifiesto la obligación de garantizar que se mantengan los esfuerzos de vacunación.
«Los menores nacidos justo antes o durante la covid-19 están superando la edad a la que normalmente deberían haber recibido las vacunas», por lo que Unicef apremia a «ponerse al día con las dosis perdidas y prevenir brotes de enfermedades mortales». Vera ha lamentado que hayan caído tanto las tasas de vacunación infantil como la confianza de la sociedad en la inmunización ante la extensión de dudas sobre su eficacia y «mensajes manipulados», a pesar del «logro histórico sin precedentes y las muertes evitadas» por los sueros contra la covid-19«. »Las vacunas son historias de éxito de la humanidad y salvan entre 4 y 5 millones de vidas al año«, ha enfatizado Vera, quien ha señalado que a pesar de la caída de la confianza en la vacunación en España, »las tasas siguen siendo altas«. Pero en Unicef existe el temor de si el descenso en la valoración de las vacunas se tradujera en una disminución de la inmunización, resurgirían en España enfermedades ya erradicadas o arrinconadas.
En este sentido, Lorena Cobas, de emergencias Unicef España, se ha referido a lo sucedido con el ébola hace unos años, «una enfermedad que traspasó las fronteras», y ha incidido también en que el cambio climático está haciendo resurgir enfermedades en muchos lugares del mundo, que pueden acabar llegando a nuestro país. Aunque considera que hay que esperar para confirmar si se mantiene la caída de la inmunización y de la confianza en los próximos años, Vera cree que hay que redoblar el compromiso, aumentar la financiación y evitar que la vacunación sistemática se convierta en otra víctima de la pandemia. En caso de que esto ocurriera, advierte de que la próxima oleada de muertes infantiles podría deberse a un aumento de enfermedades prevenibles, como sarampión o difteria.