La factura de la luz del mercado regulado o PVPC rondará en septiembre los 57 euros, con lo que se situará como la segunda más cara de 2023, solo por detrás de la que pagaron los consumidores en febrero, aunque sigue siendo un 40 % más barata que hace un año. Según los datos del simulador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) consultado por EFE, con una potencia contratada de 4,4 kilovatios y un consumo mensual de 250 kilovatios hora (KWh) distribuido en los diferentes periodos (punta, llano y valle), un consumidor tipo del mercado regulado pagará en septiembre una factura de 56,9 euros. Este precio es un 40 % inferior en comparación con los 95,2 euros que se pagaron en septiembre de 2022, hace un año, cuando la invasión rusa de Ucrania provocó una crisis energética sin precedentes en toda Europa, disparando los mercados energéticos hasta máximos históricos durante el verano.
Asimismo, cae un 54 % en comparación con el récord de 123 euros registrado en marzo de 2022, aunque sigue siendo un 10 % superior a la factura de septiembre de 2020, el año de la pandemia. En lo que va de año, los consumidores del mercado regulado han pagado una factura media mensual de 53,3 euros, menos que en el mismo periodo de los ejercicios 2018, 2019, 2021 y 2022, y solo un 9 % más que entre enero y septiembre de 2020.
La luz sube pero sigue más barata que en 2022
Pese a la tendencia alcista de los últimos meses, la factura se mantiene en niveles notablemente más bajos que los del año pasado, gracias a la caída del mercado mayorista, que se ha estabilizado en los últimos meses en el entorno de los 90-100 euros/MWh. En septiembre, la electricidad se ha pagado de media a 103,6 euros/MWh, un 8 % más que en agosto y cerca de un 14 % por encima del importe de julio, pero menos de la mitad que hace un año. Este precio del mercado mayorista es también un 66 % inferior respecto al máximo histórico de 308,6 euros/MWh que se alcanzó en agosto de 2022, el mes más caro hasta la fecha.
Asimismo, desde que comenzó el año la luz se ha pagado de media a 91 euros/MWh, notablemente por debajo de los 233 euros/MWh de 2022. Este descenso, provocado por la caída de la demanda y el precio del gas, ha hecho innecesaria la aplicación del llamado tope al gas, que ya encadena 216 días sin activarse y suma 231 días desde que entró en vigor, en junio de 2022. Además de la caída del mercado mayorista, también se han hecho notar las sucesivas rebajas del IVA aprobadas por el Gobierno para la factura eléctrica, que actualmente se sitúa en el 5 %, cuando en junio de 2021 estaba en el 21 % habitual.
Últimos tres meses del actual PVPC
El actual modelo de la tarifa regulada o PVPC estará vigente durante tres meses más, antes de que la nueva fórmula comience a funcionar el 1 de enero de 2024, tras el compromiso que adquirió el Gobierno con Bruselas hace meses para aprobar el tope al gas. La indexación de la nueva fórmula de cálculo a los mercados a plazo reducirá la volatilidad, aportando más estabilidad a las facturas finales de los consumidores y manteniendo las señales de ahorro y consumo eficiente. Concretamente, se fija un marco transitorio por el cual el peso de la señal a plazo se incrementará progresivamente entre 2024 y 2026, de modo que para el primer año representará un 25 % e irá subiendo hasta alcanzar un 55 % en 2026, dejando el porcentaje restante (45 %) a la diaria e intradiaria. A su vez, las referencias de precios de los mercados de futuro estarán integradas por una cesta de productos a plazo con distinto horizonte temporal: el 10 % corresponderá al producto mensual; el 36 %, al trimestral, y el 54 %, al anual.