Unos 2.000 tractores, según cálculos de Unió de Pagesos (UP), han entrado este miércoles en Barcelona por la Meridiana y por la Avenida Diagonal, dos de los principales accesos a la capital catalana, para dirigirse a continuación al centro de la ciudad y trasladar sus reclamaciones a las administraciones públicas.
Una delegación de estos agricultores, que desde este miércoles se movilizan para alertar de la crítica situación que vive el sector, agravada por la sequía, prevé incluso reunirse con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en busca de soluciones a sus problemas. Los agricultores han partido entre las 07.00 y las 09.00 horas de Fondarella (Lleida), l'Aldea y Montblanc (Tarragona), Vic (Barcelona) y Medinyà (Girona), entre otros lugares, y han avanzado en marcha lenta por vías como la A2, la AP-7 o la C-17 hasta llegar a Barcelona sobre las 14.00 horas.
Los manifestantes que venían del Ebro, del Camp de Tarragona y de Lleida han empezado a estacionar sus tractores en la avenida Diagonal de forma que la cabecera de tractores llegue hasta la intersección con el Paseo de Gràcia. Por su parte, la marcha que ha llegado desde Girona y del centro de Cataluña han entrado a la ciudad por la Meridiana, han continuado por Paseo de Gràcia, con la intención de aparcar sus tractores frente al Departamento de Acción Climática.
Al aparcar sus vehículos, los agricultores se han dirigido a pie a la sede de la Delegación del Gobierno en Barcelona y a la sede de la representación de la Comisión Europea en Barcelona.
Los agricultores han seguido su protesta a pie hasta la plaza de Sant Jaume, donde han sido recibidos por Aragonès y con el conseller de Acción Climática, David Mascort, en el Palau de la Generalitat. Durante todo el día esta importante tractorada ha provocado numerosas retenciones de tráfico en diferentes puntos de las vías catalanas, que han llegado a los 18 kilómetros en algunos tramos de la A-2 o circulación intensa en un tramo de 19 kilómetros en la AP-7, entre Sant Celoni y Fogars de la Selva.