El Partido Popular no descarta que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sacrifique a su candidato en Cataluña y ganador de las elecciones, Salvador Illa, y permita gobernar al líder de Junts, Carles Puigdemont.
El portavoz del PP, Borja Sémper, se ha preguntado en rueda de prensa si alguien está en condiciones de afirmar que Pedro Sánchez no puede hacer presidente de la Generalitat a Puigdemont, al comentar que no se fía «un pelo» del socialista. «Todo lo que ha pedido Puigdemont a Sánchez se lo ha concedido, ¿por qué en esta ocasión va a ser diferente?, ha preguntado Sémper y ha interrogado además sobre «si ¿hay algún español en disposición hoy de jugarse su patrimonio afirmando que el señor Sánchez no va a sacrificar al señor Illa».
Sémper ha comparecido después del Comité de Dirección del PP, que ha recibido con aplausos al presidente del partido, Alberto Núñez Feijóo, y Dolors Montserrat, candidata en las europeas y directora de campaña de las catalanas, tras los 15 escaños logrados en Cataluña. La dirección de Génova ha compartido además la visión de Alejandro Fernández respecto a los pactos en Cataluña, después de que su candidato haya reiterado que no dará sus votos al PSC si los socialistas no rompen con los independentistas y haya dicho en RAC1 que «por ahora» no ve «viable ningún escenario de colaboración».
«Estamos convencidos de que como Pedro Sánchez depende del independentismo para seguir en la Moncloa no romperá con los independentistas tampoco en Cataluña», ha señalado también Sémper. «Que nadie espere que el PP avale pactos con independentistas», ha subrayado. El PP avisa a Sánchez de que no encontrará a nadie más dócil que Aragonès Por otra parte, el portavoz del PP ha expresado su respeto por la decisión del todavía president de la Generalitat, Pere Aragonès, de dejar la política tras el descalabro de ERC, al tiempo que se ha preguntado si ha renunciado o «le han renunciado». Además, ha advertido a Sánchez de que no va a encontrar a alguien «tan políticamente dócil al frente de ERC» como Aragonès, preguntándose qué impacto tendrá su marcha tanto en el Congreso como en Cataluña.
El portavoz del PP ha loado además los resultados de su partido, y ha sostenido que suponen un «paso de gigante para que se pueda dar el cambio político» en España. El diagnóstico del PP es que Sánchez «ha expulsado del PSOE el voto de centro, un voto centrista, moderado que recoge el PP» y que los socialistas solo crecen en Cataluña a «a costa de fagocitar a partidos de izquierdas e independentistas».
Además, creen que los problemas de Sánchez se mantienen con una situación incierta en Cataluña y sin más estabilidad en el Congreso, por lo que el presidente depende más del independentismo cuando el país está «paralizado, sin presupuestos y con un posible caso de corrupción que afecta al Gobierno y al PSOE».
En este contexto, el PP salta ya a la pantalla de las elecciones europeas del 9 de junio que aspiran a ganar. El portavoz del PP ha evitado además analizar el aguante de Vox en Cataluña, y preguntado sobre si repetirán el esquema de la campaña catalana, que el PP culminó vinculando inseguridad e inmigración ilegal, ha dicho que están convencidos de que la victoria descansa en los españoles hartos de la polarización y la división.