Los Premios César vivieron este viernes una de sus galas más polémicas por el reconocimiento a Roman Polanski como mejor director.
El cineasta ha sido acusado en numerosas ocasiones de violación, la última por parte de Valentine Monnier, una mujer francesa que asegura que Polanski la violó cuando ella tenía 18 años.
Polanski no acudió a la entrega de los premios del cine francés. La gala estuvo marcada por las protestas contra el director, tanto en el exterior del recinto donde se celebraba la ceremonia como dentro, donde varias personas mostraron su enfado.
Especialmente visible fue la reacción de la actriz Adèle Haenel, nominada a mejor actriz, quien abandonó la gala al grito de «¡Qué vergüenza!» cuando Polanski fue premiado. Haenel ha denunciado por acoso sexual al director Christophe Ruggia.
Les Misérables, ópera prima de Ladj Ly, fue distinguida como la mejor película en la 45 edición de los premios, que ensalzaron a Roman Polanski como mejor director por J'accuse. Las dos cintas estaban empatadas con doce nominaciones cada una y la de Polanski.
Roschdy Zem fue elegido como mejor actor por Roubaix, une lumière, de Arnaud Desplechin, y Anaïs Demoustier como mejor actriz por Alice et le maire, de Nicolas Pariser.