Señoras con bolsas de plástico en la cabeza «por lo que pueda ser» -no es broma- ante la falta de mascarillas. Metros y metros de estanterías vacías, arrasadas, como si una hecatombe de proporciones bíblicas hubiera asolado las cadenas de abastecimiento. El hueco anteriormente ocupado por todo tipo de productos de mayor o menor necesidad, desde sardinas en lata a papel higiénico, como símbolo de que existe una preocupación real entre la ciudadanía española, por los efectos que la crisis del coronavirus puede acarrear.
Sin embargo, en este contexto de actualización constante de cifras y de anuncios más o menos sorprendentes, hay quien trata de quitar hierro al asunto a través del humor plasmado en memes y publicaciones.
Otros tan solo tratan de mostrar lo kafkiano de algunos comportamientos ante un asunto sobre el que todo el mundo habla.