Dicen que rectificar es de sabios. Tras las fuertes criticas recibidas en las redes sociales por anunciar que hablaría castellano en sus vídeos de Youtube, Miquel Montoro ha vuelve al catalán en las redes sociales. Eso sí, subtitulando en castellano.
El yotuber mallorquín se convirtió en el centro de la polémica tras anunciar el cambio de lengua para así poder llegar a más seguidores y, consecuentemente, a más marcas. «Os explico, hablo castellano porque hay muchísima gente que me pide por favor que hable en castellano. Es un montón de gente. Como hay más personas de habla castellana y los que hablamos mallorquín lo entendemos, en la escuela nos lo enseñan, he decidido hacerlo en castellano», explicaba hace unos días el joven payés.
La noticia provocó un gran debate lingüístico en las redes sociales. Mientras que unos apoyaban la decisión de Montoro, la mayoría le criticaban el hecho de perder su «esencia».
Finalmente, el influencer ha optado por una opción que parece que contenta a la mayoría. En su último vídeo subido a Youtube habla mallorquín pero lo subtitula en castellano. Una decisión que le permite llegar a más público y expresarse en su lengua.
Qué grave tiene que estar este país como sociedad supuestamente moderna y avanzada, cuando continuamente tenemos que ver y soportar hasta en la sopa la increíble e injustificable atención que se le presta a este muchacho, todo a raíz de un absurdo y nada ejemplar video que publicó en YouTube, muy excitado él porque iba a zamparse una olla de albóndigas. Este chaval donde debería estar es estudiando y adquiriendo conocimientos y algo de cultura, que le hace buena falta, y luego ya de paso también le convendría acudir todos los días a un gimnasio a quemar esa grasa que le sobra. Lamentable ejemplo estáis promocionando para los niños y jóvenes.