Que una mujer tenga gemelos es algo normal. No lo es tanto que estos se lleven una década de diferencia. Eso es lo que ha ocurrido en el Hospital Materno-Infantil de la provincia de Hubei, en China.
Según informa el diario People's Daily, hace 10 años, Wang, que ahora tiene 41, tenía muchos problemas para quedarse embarazada, por lo que, tras acudir a hospitales e intentar varios métodos, optó por el de la fecundación in vitro (FIV). Y es así cómo en 2010 la mujer tuvo a su primer bebé, totalmente sano.
El pasado 16 de junio, 10 años después de aquel primer parto, ha nacido su segundo hijo gracias al mismo método y a partir de un embrión que permaneció congelado tras aquel primer procedimiento y de cara a futuros intentos.
Al fecundarse con otro de esos embriones, desde el punto de vista médico, se trata de un caso de hermanos gemelos, pero concebidos con una década de diferencia.
La madre asegura que, a pesar de separarlos diez años, «hay muchas similitudes entre ellos».