Jorge Javier Vázquez se ha sincerado este miércoles sobre la preocupación que siente por la salud de Lima, su galga, que padece una afección en el estómago. El catalán ha escrito en su blog de Lecturas sobre el miedo que le invade ante la posibilidad de recibir malas noticias de la clínica donde ha ingresado el animal.
El conductor de Sálvame ha recordado su conversación con el veterinario: «'¿Se va a morir?', le he preguntado. 'No creo', responde. 'Pero está mal'. También le llevamos a Cartago una mañana porque lo vimos raro y no volví a verlo con vida. Qué tristeza tengo. Qué pena. Cuánto la echo en falta. Quiero mucho a mis cuatro galgos, pero ella es mi preferida».
El presentador no quiere ponerse en lo peor, aunque ante la situación, le resulta inevitable: «Estoy inquieto, porque no me he despedido de ella, porque pensaba que lo suyo no sería nada. Y ahora me da miedo pensar que en cualquier momento me pueden llamar para decirme que ha muerto».
En este sentido, el rostro de Mediaset ha reflexionado sobre el dolor que genera la pérdida de un hijo. «Si este dolor se pasa con un perro, no quiero ni imaginar el que puede llegar a sentirse por un hijo», a lo que ha añadido que entiende que la gente que dice adiós a un hijo «enloquezca» y que «es muy valiente ser padre».
«Echo de menos la mirada de Lima, besarla, verla andar por la casa. Qué angustia provocan las llamadas de teléfono cuando existen posibilidades de que te comuniquen una mala noticia», ha zanjado el televisivo, a la espera de una respuesta, a ser posible, optimista.