La campaña de la Renta 2022 empieza en poco más de mes y medio, y una de las principales preocupaciones de los contribuyentes es si la existencia de dos pagadores a lo largo del ejercicio puede hacer que nos salga a pagar más.
En realidad, esta idea preconcebida no es del todo cierta, tal y como recoge el portal Noticias Trabajo en una información, siempre y cuando se apliquen las retenciones del IRPF adecuadamente.
La ley dice que tienen la obligación de presentar la declaración de la Renta aquellos trabajadores que superen los 14.000 euros de ingresos anuales teniendo más de un pagador, siempre y cuando hayan cobrado más de 1.500 euros del segundo (o de la suma del resto de pagadores, además del primero).
Como recoge Noticias Trabajo, esto no significa necesariamente tener que pagar más impuestos. La clave está en ajustar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a la situación del trabajador.
Lo que ocurre es que normalmente, los pagadores establecen las retenciones del IRPF en la nómina sin tener en cuenta al resto de pagadores, por lo que al final al trabajador se le están aplicando unas retenciones menores a las que les corresponde, y por eso tiene que pagar al final.
Lo que puede hacer el trabajador es pedir voluntariamente a una de las empresas pagadoras que suba la retención del IRPF para que así el gravamen no sea superior al tipo impositivo que se le ha ido aplicando al trabajador.
Además, hay que tener en cuenta que todos los beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital (IMV) tienen la obligación de hacer la declaración de la Renta, y que la Agencia Tributaria también considera segundos pagadores las ayudas sociales, la prestación por desempleo, algunas pensiones o los ERTE.