El cantante canadiense Justin Bieber fue diagnosticado con el síndrome de Ramsay Hunt el pasado mes de junio, lo que le obligó a posponer varios espectáculos de su gira. Este síndrome se trata de una erupción en la cara, que ocurre cuando el virus de la varicela-zóster infecta un nervio en la cabeza. Es decir, el paciente sufre una parálisis facial. Afortunadamente, el cantante ha tenido una breve recuperación, y el 31 de julio volverá a los escenarios, según ha confirmado su representante a Variety.
Tras superar su problema de salud, la estrella del pop retomará su gira mundial Justice con un concierto en el Lucca Summer Festival en Italia. Seguidamente, tiene cinco shows previstos al norte de Europa en el mes de agosto, antes de dirigirse a Sudamérica en septiembre. Continuará con su tour por Sudáfrica, Asia, Australia y Nueva Zelanda antes de regresar a Europa a principios de 2023, con dos paradas en España: Madrid y Barcelona. Por otro lado, estima que los conciertos pospuesto en Norteamérica no tendrán lugar hasta la próxima primavera, cuando termine sus citas en Europa.
No es la primera vez que la salud de Justin Bieber se ha visto perjudicada por una enfermedad rara. El pasado 2020, sufrió Lyme, una anomalía provocada por la picadura de una garrapata. También, en aquella ocasión el artista tuvo que posponer muchos conciertos ya que uno de los principales síntomas es la astenia. En otros términos, cansancio que se puede prolongar pese a recibir el tratamiento adecuado. Asimismo, pueden desarrollarse otras dolencias como fiebre o cansancio muscular. En esta ocasión, el cantante declaró a través de un video en Instagram que se encontraba físicamente incapacitado para actuar.