La Policía Local de Écija puede ver desde el aire a los que orinan en la calle. Esa es precisamente la función de su dron Perseo, perseguir a los incívicos que en vez de ir a un baño público deciden desahogarse en una esquina aprovechando la oscuridad de las calles. La consecuencia: marcas antiestéticas y olores indeseados. Y ahora, una multa.
La Policía, avisada por el dron, se presenta en el lugar de los hechos y los pilla infraganti. El sistema también se usa contra botellones y otros actos incívicos. A algunos vecinos este método les genera dudas.
La prensa local recoge estos días que el dispositivo especial con agentes a pie, motorizados y con la puesta en funcionamiento por primera vez de la unidad de dron, han permitido la localización de casi una treintena de personas en el primer fin de semana (el de Nochebuena y Navidad) a las que han multado, y la mayoría de ellos por orinar en la calle.