La Basílica de la Sagrada Familia ha iluminado este domingo por primera vez los terminales de las cuatro torres de los Evangelistas. A finales de septiembre se culminó la construcción de las dos últimas torres con la colocación de las esculturas creadas por Xavier Medina-Campeny: un ángel (Mateo) y un águila (Juan).
La coronación de las otras dos torres con las esculturas de los evangelistas Marcos y Lucas ya se llevó a cabo en 2022, representados tradicionalmente con la figura de un león y de un buey, respectivamente.
El cardenal arzobispo de Barcelona, Joan Josep Omella, ha oficiado este domingo una misa en la basílica y posteriormente ha bendecido las cuatro torres.
La Junta Constructora de la Sagrada Familia mantiene que el templo estará finalizado en un máximo de 10 años, si no hay un contratiempo como lo fue la pandemia. Los grandes retos pendientes son la torre de Jesús, la más alta, y la fachada de la Gloria, junto con su escalinata. Las cuatro torres evangelistas se han iluminado poco minutos después de las siete de la tarde, junto a la estrella que corona el templo, de color blanco.