La última noche del año, Nochevieja, está llena de tradiciones y supersticiones. Además de las doce uvas, el oro en la copa, brindar y alguna más, hay algo que hacemos casi siempre y además, en todo mundo ocurre: besar a las personas con las que estamos alrededor.
¿Cuál es el origen de esta práctica? Según recoge el Mirror en un reportaje, se cree que tiene su origen en culturas antiguas y tiene sus raíces en la superstición.
En el folclore alemán e inglés, la primera persona con la que te encuentras en el Año Nuevo determina si tendrás buena o mala suerte el año que viene. Es decir, que besar a un ser querido al filo de la medianoche indicará una relación sólida a lo largo de 2024.
No sólo eso, sino que la tradición histórica se remonta a los romanos, quienes organizaban una fiesta para la celebración pagana de las Saturnales a finales de diciembre.
Algunos creen que darle un beso a alguien al filo de la medianoche es una versión adaptada de esta antigua tradición. Además, besarse a medianoche también era una tradición durante el Renacimiento, cuando los bailes de máscaras eran populares en toda Europa.
A medianoche la gente se quitaba las máscaras y los besos eran una forma de purificarse unos a otros del mal. Era una forma de empezar el nuevo año con borrón y cuenta nueva, según Joanne Wannan, autora del libro Kisstory: A Sweet and Sexy Look at the History of Kissing.
Además, durante Hogmanay, la celebración del año nuevo escocés, es tradición dar un beso a todos en la sala, no solo a una persona, y la idea es conectar a amigos y extraños. Otra popular superstición de Nochevieja dicta que si besas a alguien en Nochevieja, tendrás un año de suerte en el amor