El príncipe Guillermo ejerció como asistente del novio este viernes en la boda de su amigo Hugh Grosvenor, el séptimo duque de Westminster, con Olivia Henson. En ella no estuvo presente Kate Middleton, convaleciente por la quimioterapia a la que se está sometiendo tras anunciar el pasado mes de marzo que padece cáncer.
La última vez que la princesa de Gales fue vista en público fue hace tres meses cuando anunció su enfermedad a través de un vídeo publicado en sus redes sociales, aunque se espera que reaparezca brevemente el próximo 15 de junio en el balcón del Palacio de Buckingham en ocasión del Trooping the Colour.
La ceremonia se celebró en la catedral de Chester, en el noroeste de Inglaterra, y a ella acudieron unos 400 invitados, aunque entre ellos no estuvo Jorge de Gales, el hijo de 10 años de Guillermo y ahijado del millonario, al tener que acudir al colegio.
Otras ausencias sonadas en la celebración fueron las de Carlos III, que también ha sido diagnosticado con cáncer, y el príncipe Harry. Al parecer, este último pactó con su hermano quedarse en Estados Unidos para no acaparar los focos y evitar tensiones.
Guillermo, de 41 años, y Harry, de 39, están distanciados desde que el segundo se desvinculara de la monarquía en 2020 para mudarse a Norteamérica con su esposa, Meghan Markle, con quien tiene dos hijos, Archie y Lilibet.
En los últimos meses, el príncipe de Gales ha espaciado mucho sus actos oficiales y en las pocas apariciones públicas que ha hecho han sido sin su esposa. Así, el pasado 19 de marzo, visitó la sede de una asociación en Sheffield dedicada a acabar con la falta de vivienda, mientras que el pasado mes de mayo se rodeó de sus primos hermanos en la fiesta de jardín en el Palacio de Buckingham.
Los novios
Grosvenor es uno de los aristócratas más ricos del Reino Unido y propietario de buena parte del centro de Londres, además de gran amigo del príncipe Guillermo. El multimillonario conoció a Olivia Henson tras ser presentados en 2021 por amigos comunes. La ahora nueva duquesa de Westminster, que creció en Londres y en el condado de Oxford, es una apasionada de la nutrición y la sostenibilidad en la alimentación.
Un portavoz de la pareja dijo que los dos "pusieron mucho cuidado en la planificación de la boda, poniendo su sello personal en todos los preparativos, e hicieron un esfuerzo consciente por involucrar a proveedores locales y regionales en varios aspectos del día".
El duque de Westminster encabezó este año la lista de los cuarenta ricos menores de 40 años de The Sunday Times, con una fortuna estimada en 10.100 millones de libras (11.750 millones de euros).
El duque de Westminster se convirtió en multimillonario cuando heredó su título y el control del legado de los Grosvenor a los 25 años, tras la muerte de su padre por un ataque cardíaco en 2016. Su empresa inmobiliaria, Grosvenor Group, posee alrededor de 300 acres de terreno en Mayfair y Belgravia, dos de los barrios más acomodados de Londres, así como importantes terrenos e inmuebles en otras ciudades del Reino Unido.