Hace un año, había 12.156 parados registrados que llevaban sin trabajar más de un año. En febrero eran 33.182, de forma que se ha casi triplicado. El Archipiélago sigue siendo la comunidad que más empleo destruye y donde más aumenta el paro. Todo ello, contando la protección de los ERTE, que acabará el 31 de mayo. Un total de 84.581 personas están en el paro en Balears, 27.016 más que un año antes. La afiliación a la Seguridad Social se sitúa en 413.235 personas, 28.432 menos que un año antes. Y de los que trabajan, 38.649 están en Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), ya sea parcial o total.
Estas son las consecuencias en el mercado laboral de la tercera ola de la pandemia, que ha ralentizado la recuperación y ha tenido un mayor efecto en hostelería, con la práctica inexistencia de turismo en las Islas y numerosas restricciones de movilidad y de actividad.
Muchas personas llevan sin trabajar desde el inicio de la pandemia. Así lo indican los datos de paro registrado según la duración de la inscripción que ofrece el Institut Balear d'Estadística (Ibestat).
El mayor incremento del desempleo en las Islas se observa en el tramo de personas que llevan entre un año y un año medio en paro: se ha multiplicado por cinco, llegando a las 18.599 en febrero, cuando un año antes eran 3.398. Hay 4.420 parados que están en llevan en esta situación entre 18 y 24 meses, el doble que un año antes (+135,23%), y otras 10.163 personas ya suman más de dos años sin trabajar, un 47,74% más. Son personas que estaban en paro ya antes de la pandemia y que no han conseguido encontrar empleo. En total son 33.182 personas que hace más de un año que están en el paro, cuando un año antes eran 11.304 (+193,54%).
Mientras que las personas que llevan en paro entre seis y doce meses se ha triplicado, pasando de 6.209 desempleados a 20.405.
Por otra parte, hay 5.609 parados que llevan menos de un mes (un 24,46% menos que en febrero de 2020), 8.806 que llevan entre uno y tres meses (-24,18%) y 16.579 personas que llevan entre tres y seis meses (-17,76%).
El paro ha aumentado un 46,9% en comparación con febrero de 2020, aumentando en 27.016 personas. El incremento es el doble que el registrado en el conjunto de España (23,5%) y es el mayor de todas las comunidades, seguida por Canarias (36,4%), Aragón (30,1%) y Catalunya (29,6%).
En cambio, las comunidades menos afectadas por el incremento relativo del paro son Extremadura (+8,3%), País Vasco (+10,1%) y Castilla-La Mancha (+11%).
Sigue habiendo más mujeres (45.801) que hombres (38.780) en el paro. Sin embargo, el desempleo interanual ha aumentado más entre los hombres (+54,4%) que entre las mujeres (+41,1%). El principal motivo es el ámbito de la ocupación, y es que donde más aumenta en términos relativos el paro es en personas sin ocupación anterior (+89,2%) y en los sectores la construcción (+82,5%) y la agricultura (+76,5%), que ocupan a más hombres que mujeres.
POR ISLAS. Las Pitiüses son las islas con más incremento del paro en este 2021 con respecto a un año antes. En Formentera hay 492 parados, 256 más que hace un año (+108,5%). En Eivissa son 11.301, lo que supone 4.094 más (+56,8%). En Mallorca el paro ha subido un 46,1%, en 21.069 personas hasta las 66.761. Y en Menorca hay 1.597 parados más, hasta los 6.027 (+36%).
La tasa de paro administrativo permite comparar la evolución del paro registrado y la del empleo. Se calcula como el cociente entre los parados y la suma de parados y afiliados. Este indicador es del 22%. Es decir, que más de una de cada cinco personas en disposición de trabajar no lo hace en estos momentos. Hace un año era del 11,53%.
El paro se sitúa en niveles del año 2014, que fue el primer año que el PIB volvió a crecer tras la Gran Recesión. En febrero de 2014 había 89.218 parados, frente a los 84.581 de ahora. Desde 2014, se redujo de forma progresiva hasta los 57.565 de 2020 (80.295 en 2015; 71.710 en 2016; 63.630 en 2017; 59.381 en 2018, y 58.125 en 2019, todos ellos datos de febrero). Por tanto, las cifras de desempleo están lejos, hoy por hoy, de los máximos que se registraron durante los peores años de la Gran Recesión (pasaron de los 48.335 en febrero de 2008 a los 74.367 en 2009, 90.026 en 2010, 89.662 en 2011, 98.352 en 2012 y 93.947 en 2013).
Si se sumaran los parados y los trabajadores en ERTE, la cifra sería de 123.230, muy superior a las cifras máximas de paro en un mes de febrero que se dieron en Balears 2010. Sin embargo, no todos los trabajadores en ERTE están sin trabajar.
AFILIACIÓN. La afiliación ha disminuido en 28.432 personas en un año. Si en febrero de 2020 eran 441.667, este mes pasado eran 413.235, un 6,44% menos. A nivel estatal, la afiliación solo se ha reducido un 2,1%. Es decir, que la ocupación ha caído tres veces más en Balears que en el conjunto de España. A esta reducción habría que sumar los trabajadores que siguen cotizando pero están en ERTE, que son 38.649, aunque no se puede conocer cuántos de ellos trabajan parcialmente y cuántos no trabajan nada.
En los tres últimos años antes de la pandemia, la ocupación había experimentado grandes incrementos, en concordancia con un aumento generalizado de la población. Entre febrero de 2017 y febrero de 2020 la afiliación a la Seguridad Social había aumentado un 9,2%, pasando de 404.480 trabajadores a 441.667, es decir, 37.187 más.
El padrón arrojaba una cifra de población en 2017 de 1.115.999 habitantes, que pasó a 1.171.543 en 2020, 55.544 más, un incremento del 4,9%.
Por tanto, la pandemia ha dejado la afiliación a niveles del año 2017 destruyendo la ocupación que se había creado en los últimos tres años a costa de aumentar el paro.
En el análisis por sectores, la nota positiva la ofrece la agricultura, donde la afiliación en febrero ha aumentado un 1,2% respecto al mismo mes de 2020 en Balears. Además de en agricultura, aumenta la ocupación en algunos servicios de carácter eminentemente público: actividades sanitarias (+6,6%), administración pública (+6,5%) y educación (+2,2%). Sin embargo, estos cuatro ámbitos que crean empleo solo suponen 43, 2.631, 1.411 y 567 ocupados más, respectivamente.
Por el contrario, el resto de actividades han destruido empleo. El sector con peor desempeño es la hostelería, donde el empleo ha disminuido un 30,3% (-18,9% a nivel estatal). En el comercio la ocupación en Balears ha bajado un 6,1% en febrero (-2,8% en España).
Mientras que la afiliación en la industria ha bajado un 5,9% (-2% a nivel estatal) y en la construcción, un 5,3% (-1%). Incluso en personal doméstico ha bajado la afiliación en 11 personas, hasta las 948 (-1,1%).
En términos absolutos y en comparación anual, se han perdido 16.868 afiliados en hostelería, 4.537 en comercio, 3.030 en la construcción, 1.627 en industria manufacturera, 1.696 en servicios auxiliares y 1.245 en actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento.
Asimismo, y como ya se había visto desde marzo, se observa en los datos de enero -los últimos disponibles- que la caída de la ocupación se ha concentrado en los trabajadores temporales.
Mientras que los empresarios por cuenta propia han aguantado mejor. En febrero había 89.976 autónomos cotizando, un 0,2% menos, que son 158 menos que hace un año.
Desde el inicio de la pandemia, Balears es la comunidad que más empleo ha destruido, y febrero no es una excepción. En comparación con doce meses atrás, la afiliación a la Seguridad Social ha caído un 6,44%, una bajada un poco mayor a la de Canarias (-6,08%).
Estas dos comunidades, archipiélagos con alta especialización en el sector turístico, son los dos valores atípicos respecto al comportamiento general del resto de comunidades. La tercera peor, Catalunya, solo ha caído un 2,37%. La media española es del 2,08%.
ERTE. A finales de febrero había 38.649 trabajadores en ERTE: 7.359 por fuerza mayor, 3.454 por causas productivas y 27.836 ligados a los nuevos ERTE vinculados al Real Decreto Ley 30/2020, de medidas sociales en defensa del empleo.
Casi uno de cada diez trabajadores afiliados a la Seguridad Social en Balears (9,3%) está en ERTE. Son más que en el conjunto de España (4,7%), pero menos que en Canarias, donde llegan al 11,6%.
El número de trabajadores en ERTE lleva dos meses en aumento debido a las restricciones. El 8 de enero el Govern obligó a cerrar bares, restaurantes, grandes superficies comerciales, gimnasios y spas de Mallorca. Unas restricciones que entraron en vigor el día 12 de enero y se alargaron hasta el 2 de marzo, cuando se ha permitido reabrir parcialmente y con restricciones. En consecuencia, si el día 31 de diciembre había 30.838 trabajaores en ERTE, el 31 de enero fueron 35.156 y el 28 de febrero, 38.649.
DEMANDANTES. Los trabajadores en ERTE figuran como demandantes de empleo. Este calificativo incluye a personas en paro que se inscriben en el SOIB para cobrar la prestación, pero también personas que quieren cambiar su posición y jóvenes que buscan su primer trabajo. De este modo, también los trabajadores que están en ERTE figuran como demandantes de empleo, lo que les permite cobrar la prestación correspondiente.
Pues bien, la suma de estos colectivos totaliza 196.635 personas en Balears en febrero de 2021. Son 76.441 más que hace un año, de forma que el incremento anual es del 63,6%.
De todos los demandantes de ocupación inscritos en el Servei d'Ocupación (SOIB), poco más de la mitad, 108.830, reciben algún tipo de ayuda económica. Además, hay que añadir 11.842 autónomos que se se han beneficiado de una prestación extraordinaria.