Un total de 41.289 ciudadanos extranjeros que habitan en Balears renovarán en 2010 su permiso de residencia temporal en España, lo que supone el doble de los que lo hicieron durante el ejercicio anterior, una diferencia que se atribuye a la entrada en vigor de la Ley Orgánica 2/2009 de reforma de la Ley de Extranjería, de 11 de diciembre, que provocó un "incremento sustancial" en la atención al público desde principios de este año.
Así lo confirmaron desde la Oficina de Extranjería en Palma de Mallorca, en el acto de presentación de un nuevo web site dirigido a los usuarios, que, según precisó el delegado del Gobierno, Ramón Socias, se trata de una "herramienta útil" que aportará "mayor comodidad y accesibilidad", al tiempo que "evitará desplazamientos" en uno de los servicios "que más presión tiene" de las áreas de gestión estatal que se encuentran en el archipiélago balear.
De hecho, en 2009 se atendieron una media de 7.000 a 8.000 usuarios al mes, con 7.927 el mes pasado. Y, tras dos semanas de operatividad del nuevo portal, se ha duplicado con creces el número de personas que realizaron sus trámites de forma telemática, pasando de las 10.600 consultas realizadas vía email en enero de 2009 a las 21.600 acumuladas en el mismo periodo de este año. Con el aliciente de que el web site puede ser usado desde todas las islas.
De este forma, con el nuevo recurso, que ha sido desarrollado por funcionarios de ese departamento y que, por lo tanto, "no se ha tenido que contratar fuera", subrayó el delegado del Gobierno, que también resaltó que el trato "cariñoso" que dispensan a los usuarios, que son, principalmente, "personas que han tenido que abandonar su país para buscar un futuro mejor", aunque "ahora no tenemos nuevas incorporaciones", a causa de la crisis.
Por ese motivo, los más de 41.000 permisos que se renovarán este año corresponden a personas que se encuentran dentro del periodo de cinco años habilitado para la estancia temporal de extranjeros, que marca una primera revisión del permiso al cabo de un año de obtenerlo, a la que siguen otras en intervalos de dos años. Todos ellos deben recurrir a la Oficina de Inmigración.
MÁS EXPULSIONES EN 2009
En 2009, se expulsaron a un total de 136 extranjeros residentes en Baleares, en su mayoría con antecedentes penales, frente a los 104 que fueron devueltos el año anterior, un incremento que, según el jefe superior del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) en Baleares, Bartolomé Campaner, "puede deberse a pateras" llegadas a las costas de las islas en ese periodo, y cuyos tripulantes y pasajeros fueron detenidos y trasladados de nuevo a su país.
A este respecto, agregó que la media de los últimos años es de unos 120 extranjeros repatriados al año, alrededor de una decena el mes. A tenor de estas cifras, el delegado del Gobierno confirmó que la Policía Nacional "no tiene orden de acelerar las expulsiones" y "no hay ningún documento secreto" que recoja esa cuestión, como se ha sugerido, sino, simplemente, una circular que recuerda las condiciones de la ley.
"No podemos permitir que haya en la calle gente que no sabemos quien es", afirmó Ramón Socias, por lo que consideró que deben seguir las identificaciones de personas en la vía pública, ya que la Policía "no tiene otra orden que hacer cumplir lo que dice la ley". Y, en esa línea, precisó que "a quienes no han delinquido se les ofrece una salida voluntaria con pago de multa", que los inmigrantes suelen preferir.
Ello se debe a que, en caso contrario, deben permanecer cinco años sin entrar en ninguno de los países que componen el llamado 'Espacio Schengen', del que forma parte España. Este acuerdo permite suprimir los controles en las fronteras interiores entre los Estados que lo firmaron, así como crear una frontera exterior única, donde se efectúan los controles de entrada según procedimientos comunes también pactados de antemano.