Los aeropuertos de Balears recibieron en 2009 un 45 por ciento menos de reclamaciones, al pasar de las 999 registradas en 2008 a las 550 contabilizadas el año pasado, en su mayoría causadas por las compañías aéreas 'low cost'. Entre el volumen de anomalías de las que los consumidores dejaron constancia, las correspondientes al transporte aéreo supusieron el 8,3 por ciento, frente al 19,6 por ciento del ejercicio anterior.
Así lo dio a conocer el conseller de Salud y Consumo, Vicenç Thomàs, en la inauguración de la 'I Jornada de Consumo y Transporte Aéreo', que se celebró ayer en CaixaFòrum de Palma, con la participación del director general de Consumo, Diego González, así como expertos en esta materia de todas las islas, representantes de compañías aéreas, del Aeropuerto de Son Sant Joan (Palma) y de asociaciones de consumidores.
En su intervención, el conseller destacó la necesidad de "avanzar en la convergencia" de los intereses de empresas y usuarios del transporte aéreo. Y, en ese sentido, remarcó el trabajo realizado desde el departamento que dirige González, basado en el seguimiento y control de la actividad aérea comercial, además de apostar por "convencer a todo el mundo de que la calidad y la protección al consumidor son unos hechos diferenciadores", dijo.
En las dos mesas redondas que se celebraron durante la jornada, se abordaron 'La transparencia y las compañías aéreas' y 'La actual percepción de las compañías por parte de los usuarios'. Y, además, se repasó la encuesta realizada entre pasajeros aéreos a finales de 2009 por la dirección general, en colaboración con la Unión de Consumidores de Baleares, que "pone de manifiesto" que "son muy conscientes del nivel de calidad de los servicios que ofrecen cada una de las compañías", expuso Thomàs.
Así, el 78 por ciento de los encuestados valoraron de forma positiva los servicios que ofrecen las compañías que operan en España y que utilizaron para viajar. En concreto, destacaron la posibilidad de realizar operaciones con las aerolíneas directamente desde sus hogares o utilizando medios informáticos, pero siempre respetando a sus clientes los derechos planteados en el contrato de vuelo -es decir, el pasaje- y el que establece la legislación.
En el sentido contrario, también "son muy conscientes" de las malas prácticas empresariales de algunos transportistas, entre ellos, algunas de las compañías de 'bajo coste', que "vacían de contenido los derechos de los pasajeros incluidos en el billete", a quienes "exigen de forma ilegal y en situaciones de indefensión" obligaciones que están al margen de lo que establecen las leyes, tanto españolas como europeas, que protegen a los consumidores y fijan sus deberes.
Cabe señalar que este tipo de actuaciones motivaron la mayoría de los 22 procedimientos sancionadores abiertos por la Dirección General de Consumo, que, por el momento, se encuentran en fase de tramitación, por lo que todavía no se ha impuesto ninguna multa a las compañías aéreas que realizan ese tipo de políticas de venta y atención al cliente, según puntualizó Diego González.
Por otra parte, el director general explico que, "en principio, no tenemos noticias de que haya afectados" por el cese de actividad de la compañía aérea Hola Airlines, que operaba desde Mallorca.