La consellera de Educación, Cultura y Universidades, Joana Maria Camps, ha señalado este martes en el Pleno del Parlament que su dimisión "la pedirá el presidente del Govern o la decidirán las urnas", dejando claro así que no va a dejar su cargo al frente de este departamento del Ejecutivo isleño.
De esta forma, ha respondido a la petición constante que durante la sesión plenaria le han realizado los diputados de los grupos parlamentarios de la oposición, que le han reclamado que dimita por haber enfrentado al Govern con todos los sectores educativos de las Islas.
Así, Camps ha añadido que "todo lo demás son gritos sin importancia", en referencia a la reclamación repetida por los diputados y también por los miembros de las entidades y sindicatos que han acudido a la Cámara autonómica como público, entre los que se encontraban los representantes de los principales sindicatos educativos de Baleares, convocantes de la huelga indefinida en el sector.
"Su incapacidad nos hace pedir su dimisión y la de su equipo", le ha espetado el diputado del grupo socialista Vicenç Thomàs en una pregunta parlamentaria, quien ha acusado a la titular de Educación de "haber logrado poner a toda la comunidad educativa en contra del PP en materia de política de educación".
Una afirmación que Camps ha rechazado, puesto que, según ha dicho, está convencida de que "la mayoría apoya nuestra política", tal y como demuestra, a su juicio, que el seguimiento en este segundo día de huelga haya disminuido al 21,2% del profesorado.