El socialismo balear mantiene su pulso frente a la posición oficial del PSOE ante la votación en el pleno de la ley orgánica que regula el proceso de abdicación del rey Juan Carlos I y abre la puerta al reinado de Felipe VI.
El PSIB, que en su próximo Consell Polític (máximo órgano del partido entre congresos), asumirá la propuesta de convocar un referéndum no vinculante sobre la monarquía o la república, defiende el voto en conciencia de sus representantes en el Congreso y el Senado. El portavoz adunto del partido en el Parlament, Vicenç Thomás, dijo que «siempre se vota en conciencia», aunque evitó un pronunciamiento más concreto. De cualquier modo, los socialistas no barajan el 'no' como opción. Se debaten entre el 'sí' (la posición oficial que defiende Rubalcaba) y la abstención, que están planteando diputadas y diputados del PSOE, y no sólo de Balears.
Más apoyos
Pablo Martín, diputado por Balears en el Congreso, todavía no ha decidido su voto pero sí que «irá en consonancia con la propuesta que defiende el PSIB». Por su parte, el diputado menorquín Guillem García Gasulla ha solicitado formalmente a la dirección socialista la libertad de voto.
La decisión se tomará en la reunión que celebra el grupo parlamentario (y que suele presidir el propio Rubalcaba) antes del inicio de los plenos. Es previsible que el grupo de Izquierda Plural (IU) presente alguna enmienda, quizá relacionada con el referéndum.
Otras federaciones del partido, como la de Galicia o Valencia, también se han sumado a la propuesta de referéndum que Francina Armengol fue la primera en plantear ante la dirección federal del partido.
Sobre este asunto, el president José Ramón Bauzá dijo que el planteamiento de Armengol, es «cada vez más extremista» y se sitúa «más a la izquierda que la izquierda».
Por su parte, Biel Barceló (de Més) celebró la posición de Armengol pero añadió que le ve poco futuro ya que «el problema del PSIB se llama PSOE».