La Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar, dependiente del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente, ha informado desfavorablemente el proyecto de prospecciones petrolíferas que la empresa Cairn Energy quiere llevar a cabo en el Golfo de Valencia.
Este informe, que se añade al expediente de tramitación de la declaración de impacto ambiental que está llevando a cabo el Ministerio, supone el primer revés para un proyecto de prospecciones cerca de Balears. De hecho, el que quiere efectuar esta empresa en el noroeste de Eivissa y Formentera es el único que ha obtenido la correspondiente licencia del Consejo de Ministros, otorgada por el gobierno del PSOE en 2010.
Aunque este proyecto no afecta directamente Menorca, la misma compañía escocesa promueve otro que sí toca directamente la Isla, y es que el que ha pedido llevar a cabo en el Golfo de León. Afectaría una extensión de 37.000 kilómetros cuadrados entre Catalunya y Menorca. Los sondeos se realizarían a una distancia de 60 kilómetros de la Isla.
Sin embargo, en este último informe, el organismo del Medio Ambiente desaconseja los sondeos sísmicos entre Valencia y las Pitiüses sobre todo por el impacto en la fauna marina, principalmente las especies protegidas y en particular los cetáceos. El documento concluye que «este proyecto no es compatible con los objetivos establecidos en la legislación de protección de la biodiversidad».
Pero en el caso de que finalmente se diera el visto bueno, recuerda que en el Mediterráneo se impulsan otros proyectos, como los que se quieren ejecutar cerca de Menorca, y que «podrían superponerse en el tiempo, por lo que con la finalidad de evitar las afecciones negativas acumulativas de dos o más proyectos, se deberá comprobar con antelación que no coincida con otras campañas previstas en la zona».
Menorca
La senadora Juana Francis Pons Vila comentó que los dictámenes oficiales sobre los proyectos de sondeos sísmicos que afectan Menorca «se conocerán el año que viene».
... Lo que de verdad nos tiene que emprenyar es que nos dan palos por todos lados. Si conseguimos parar las prospecciones, esas empresas se hacen las víctimas, aducen perjuicio económico y exigen una compensación económica millonaria. Nunca pierden. Y siempre pagan el pato los mismos, todos nosotros vía impuestos... Al menos nos queda el consuelo moral de que los responsables de tal desaguisado, los políticos que nos meten tales fregados, se vayan a casa con el culo caliente y pitándoles los oídos.