En ausencia de ríos y sin presencia de centrales nucleares, la generación propia de energía eléctrica en Balears es inversamente proporcional a la de la Península en sus fuentes. En 2015, la energía principal de las Islas sigue siendo el carbón (41 %) y junto a las otras de origen fósil como motores diesel, el gas y la quema de residuos sólidos urbanos producen el 75 % de la electricidad.
En sus estadísticas públicas del mes de marzo, Red Eléctrica de España (REE) señala que en la Península la generación procedente de fuentes de energía renovable representó el 47 % de la producción, y que en conjunto el 69 % procedió de tecnologías que no emiten CO2 a la atmósfera.
En contraste, Balears tuvo el porcentaje de fuentes productoras de energía con emisiones de CO2 del 68 %, mientras las renovables supusieron el 2,4 % y experimentaron un ligero descenso en su aportación a la red con respecto a meses anteriores.
El informe Energías renovables y eficiencia energética en Balears, publicado por el Govern en 2013, señala que «nos encontramos en situación idónea para la implantación de las energías renovables en el sistema balear, ya que la capacidad de producción está por encima de lo que necesitamos, y los incrementos pueden ser absorbidos por instalación de plantas de renovables».