La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha hecho este viernes un llamamiento a todos los agentes políticos y sociales para formar «un frente común» que exija al próximo ejecutivo estatal, «pase lo que pase el 20 de diciembre», un nuevo sistema de financiación que haga «justicia» con Baleares.
En una comparecencia pública acompañada por los diez consellers de su ejecutivo para hacer balance de los 100 primeros días de gestión del «Govern del cambio», Armengol ha resaltado la importancia de que el archipiélago «tenga un sentimiento de país claro» a la hora de reclamar más recursos del Estado.
Como hitos de las primeras 14 semanas del Govern de coalición del PSIB y MÉS, la líder socialista ha señalado la «recuperación de la paz social en las escuelas», con el añadido de la contratación de 364 nuevos docentes, y las medidas que demuestra la «apuesta por las personas más vulnerable», entre las que ha citado la devolución del derecho a la sanidad a los inmigrantes irregulares, la renta social que se implantará en 2016 y los programas de ayuda a los escolares sin recursos y de empleo para jóvenes y parados mayores de 45 años.
De cara a los próximos meses, ha avanzado la puesta en marcha de un «plan de choque para el alquiler social», la apertura por la tarde de los centros de salud, la ampliación de reservas marinas, un plan contra la violencia de género y una oficina anticorrupción, entre otras iniciativas.
La presidenta ha admitido que le «preocupa» la posibilidad de que haya una huelga en la sanidad balear, tal y como este jueves advirtieron los sindicatos, y ha asegurado que el Ejecutivo balear se dejará «la piel» para alcanzar los acuerdos que sean necesarios con los trabajadores públicos.
Armengol ha asegurado que el conflicto con el sector sanitario es «exclusivamente económico porque no tenemos el dinero para el año que viene poder pagar esta carrera profesional pactada a final de legislatura y sin tener en cuenta el presupuesto del año que viene».
La líder del Ejecutivo ha esperado que se produzcan las negociaciones que sean necesarias «para que el conflicto se vaya y devolver los derechos». En este sentido, ha remarcado que en el 2016 mejorarán los derechos de los trabajadores públicos aunque «todo de golpe» no será posible.
«En el presupuesto de 2016 habrá recursos económicos para mejorar las condiciones de todos los trabajadores públicos de Baleares, aunque no es posible todo lo que todos querrían, estamos dialogando en las mesas de negociación, nos parece importante mejorar los derechos recortados en el 2012», ha manifestado la presidenta.
Además, ha recordado que el Govern trabaja para que se vuelvan a convocar oposiciones en el sector sanitario y ha subrayado que «solo hay oposiciones cuando gobierna la izquierda».