Los juicios entre parejas divorciadas para modificar los términos de su separación se han multiplicado por tres en Balears en menos de una década. Mientras que el número de rupturas matrimoniales permanece más o menos estable en las Islas, con unos 3.000 cada año, los pleitos por las condiciones que los regulan se han disparado.
María Dolores Lozano, la letrada de Palma que preside la Asociación Española de Abogados de Familia (Aeafa), apunta como principal factor del incremento de esas peticiones a la crisis. «Un cambio en la capacidad económica repercute en que se quieran revisar las cantidades que se pagan como pensión compensatoria y por alimentos para los hijos», señala.
Proporcionalidad
El criterio del Supremo de dar prioridad a la custodia compartida de los hijos frente a la monoparental también ha llevado a numerosas peticiones en los tribunales. Lozano señala que este régimen no implica que los gastos se repartan al cincuenta por ciento entre los excónyuges sino que se fijan unas cantidades de forma proporcional a los ingresos de cada uno.